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ALFIL NEGRO

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EL GABINETE DE AMLO
NO AYUDA… PARA LLORAR

Se enredan más las cosas para el Grupo Universidad y surgen todos los días datos que hablan de un manejo por lo menos raro de los dineros de la UAEH  y posibilidades de cosas graves. La justicia tarda pero llega y a cada capillita le llega su fiestecita y a la capillita garza parece que le está llegando su día.
LOS 100 DÍAS
Ya son 100 días del gobierno de AMLO con claroscuros que cada quien podrá subrayar de acuerdo a sus propios juicios y de cómo le haya ido en la feria, porque no es la misma situación para quienes de pronto amanecieron como funcionarios de primer nivel sin el perfil adecuado pero como premio a su activismo en la campaña, que a los miles de despedidos para dar paso a los programas asistenciales que para llevarse a cabo provocaron la desaparición de acciones  serias y acreditadas en su bondad para con los ciudadanos, pero que por lo que se ve no eran signo de la bondad del Presidente.
Y son miles los despedidos, aunque tuvieran antigüedad en su trabajo o fueran de estructura. “Pa’ fuera”.
Ni se diga las decisiones que se convirtieron en agresiones contra niños y mujeres.
Sin embargo, alguna encuesta dice que tiene más del 80 por ciento de apoyo aunque en las redes sociales se diga otra cosa.
Y al Presidente se le ve con ganas, que empiezan con las desveladas todas las mañanas para sus conferencias que fijan agenda de trabajo del día y que no siempre encuentran eco en su gabinete o en sus legisladores que dan la impresión de traer su propia agenda en que la voluntad del jefe cuenta sólo como recomendación pero no como palabra que se debe cumplir en las acciones.
Después de cien días se tiene la impresión de que el gabinete presidencial es muy pequeño en capacidad para enfrentar las tareas que se tienen encomendadas y sin la decisión de quien se supone es su jefe.
Entre la raza se dice que no dan una y que algunos por edad, falta de experiencia y protagonismos tontos,  exhiben al Presidente y se exhiben ellos como ineficaces, y cortos de entendederas.
Vaya, que el gabinete no funciona como debería de funcionar y más bien le estorba al Presidente.
Ya se sabe que cuando el río suena es que lleva agua.
El juicio de muchos ciudadanos es que los funcionarios de primer nivel no dan el ancho , de tal manera que la Secretaria de Gobernación OLGA SÁNCHEZ CORDERO no convence y más después de que trató de ocultar un departamento a la hora de dar a conocer sus bienes. A su edad y cargo como que no checa. Súmele a eso que el mismo Presidente hace de titular de Gobernación para tener el cuadro patético completo. Antes ese cargo era para un súper secretario que la verdad no se ve con doña Olga.
MARÍA LUISA ALBORES la Secretaria de Bienestar, antes Desarrollo Social, puso en la red un mensaje en que daba 5 RAZONES POR LAS QUE NO QUIERES BIENESTAR EN MÉXICO, en que la disyuntiva era apoyar al gobierno o eres un mal mexicano.
Desde luego que ante la reacción ciudadana de enojo y condena salieron con el cuento de siempre: “No estaba validada y se quitó de la red”,  o lo que es lo mismo: “es un error de dedo”.
Como que los funcionarios no acaban de entender que no son porristas del Presidente y menos con recursos públicos.
Y qué decir del Secretario de Turismo MIGUEL TORRUCO y sus spots grillos y sin ninguna mensaje real de promoción del turismo,  ante lo cual el mismo Presidente ordenó bajar esa genialidad.
Y JAVIER JIMÉNEZ ESPRIÚ EL Secretario de Comunicaciones y Transportes negando sus pertenencias y con una serie de desaciertos que lo ponen en el escenario de la incompetencia total.
ROCÍO NAHLE la Secretaria de Energía es otro caso que nos habla de un gabinete impresentable para las batallas que se quieren dar.
Bueno, cómo estará el asunto que el gabinete de Peña Nieto se ve mejor que el de AMLO.
Ya se sabe que saldrán con eso de que Sí, pero los de AMLO no son  rateros. Puede ser, pero ejercer un cargo sin tener la preparación para tenerlo es un robo al pueblo en sus sueños de vivir mejor.
Seguramente hará cambios y ojalá sea pronto, porque si no las cosas no pintan bien.
Es tal la pobreza del gabinete presidencial que muchos gabinetes de gobernadores se ven mucho mejor en trabajo y capacidad que ellos.
Y así no se puede…
Van 100 días.