SE COSECHA LO QUE SE SIEMBRA
En estas últimas horas, lodo por todos lados en busca de lastimar al de enfrente y tener ganancias para las elecciones. Pero el que acusa y se rasga las vestiduras, ve la paja en el ojo ajeno y no ve la viga que tiene en el suyo. Siempre ha sido así…
LA COSECHA….
A cuatro días de la gran elección y con las campañas a terminarse este día, y sin dejar de ver lo que dicen los que saben de política y analizan los posibles resultados con argumentos de conocedores, lo que parece ser un factor central de los resultados, es verlos como producto de una siembra en la que dice la sabiduría popular “se cosecha lo que se siembra”.
Se dice que quien siembra vientos cosecha tempestades, en concordancia con una lógica implacable que dice que si sembraste maíz lo más seguro es que coseches maíz, y que si sembraste cosas buenas con toda seguridad cosecharás cosas buenas.
En la política debe ser lo mismo.
Los votos son la cosecha, que cada apuesta de partidos o coaliciones espera recibir en respuesta a una buena siembra.
No se puede esperar una gran cosecha si no se ha sembrado confianza y seguridad en los electores, que apostarán su futuro a quienes los convenzan de ser garantía de honestidad, trabajo y resultados.
En el escenario nacional se ha dicho ya mucho y cada quien tiene una visión más o menos claras de las cosas.
Hablemos de Hidalgo, porque duele más el pellejo que la camisa.
No es raro que se diga que la contienda fuerte será entre los candidatos del PRI y los de MORENA.
En la propuesta inicial de que se cosecha lo que se siembra, se debe ver lo que cada uno de los partidos ha sembrado para poder avizorar por dónde pueden caminar las cosas.
EL PRI por haber ejercido el poder con más presencia que Morena debe tener por razones naturales más frutos malos y buenos. De eso no hay duda.
Lo que valdría la pena en el escenario de la justicia, es pesar en la balanza de la evaluación qué pesa más en esa medida si lo bueno o lo malo, porque sus rivales de enfrente subrayarán como estrategia los frutos malos y de ninguna manera se acordarán de lo bueno.
El partido tricolor tiene como sus pecados más graves los de la deshonestidad y la impunidad, y en esa acusación debe haber verdad, porque es la canción que una y otra vez le dedican los de enfrente.
A su favor todo un trabajo que nadie puede negar y que le ha permitido a Hidalgo avanzar y caminar por la vía del progreso, que no se puede tapar con un dedo, porque es innegable que el estado ha avanzado en los gobiernos priistas con obras y acciones que todo mundo puede ver.
Para esta elección tiene a su favor aparte de una agenda de logros por todos los gobiernos tricolores, la presencia en este momento de un buen gobernador, Omar Fayad, evaluado entre los mejores del país por sus acciones y por un programa de gobierno que arrancó de raíz muchos vicios y abusos y que tiene logros históricos para Hidalgo.
Es tal la fuerza del gobernador que Morena ha dedicado desde hace buen rato todos sus ataques en su contra, porque saben lo que puede pesar este buen gobierno en la hora de la votación.
MORENA representa por la presencia de AMLO la oportunidad para que los ciudadanos ajusten cuentas con el PRI equivocado y erróneo, por cierto, el discurso de todos sus candidatos que una y otra vez repiten lo que consideran las fallas de los tricolores.
Tiene también a su favor que no ha ejercido el poder y por ello es difícil encontrarle pecados en el ejercicio del mismo.
SIN EMBARGO en esta votación todo indica que cometió un grave error al darles las candidaturas no a gente del partido como debía de ser, sino a arribistas y ambiciosos como son los del Grupo Universidad, a Sosa Castelán que de esta manera se apoderó del partido para lo que es su lucha personal por el poder en el estado.
Fracasado en este intento muchas veces pese a comprar más de un partido político para ese fin, logró lo que parece un cambalache, vender al Grupo Universidad al Peje a cambio de candidaturas para sus planes personales.
Los de Morena ni las manos metieron para defender sus derechos de partido y quedaron al servicio de Sosa, empezando por su presidente Abraham Mendoza. Es lo que se alcanza a ver.
Y en este cosechar lo que se siembra, el ciudadano seguramente evaluará lo que ha sembrado cada uno de los contendientes.
El PRI lo que queda dicho en blanco y negro y Morena, lo que vendió como opción real para ganar el poder en Hidalgo y que se cambió por la ganancia de apoyo del GU.
Y en ese cambio se vendió a un grupo que ha sembrado muchos vientos como para cosechar tempestades pues para muchas familias de hidalguenses no hay olvido para las agresiones que sufrieron por el dueño del GU, cuando era dueño de la FEUH y muchos universitarios por los abusos cometidos en la casa de estudios, incluido el manejo turbio de sus dineros como quedó claro en el caso de “Lady albañil”, que llevaba más de un millón de pesos, al parecer para pagar movidas de Morena.
El primero de julio se cosechará lo que se sembró… no hay de otra.
