
Tras los Juegos Olímpicos de Tokio, Alejandra Orozco se atendió una lesión en el hombro, que la alejó de su amor: los clavados. En 2022, regresó a la actividad, pero tuvo que hacerlo desde cero, como si fuera una novata, proceso que la hizo recordar sus inicios, pero ahora se encuentra al 100% para afrontar un 2023 de retos.
“Me reté a subir de nuevo a la plataforma de 10 metros… Ya lo cumplí. Viene el reto dos: competir y conseguir la plaza olímpica. El reto tres son mis terceros Juegos Panamericanos, donde quiero estar en lo más alto del podio”, aseguró, en entrevista exclusiva.
Ale se define como una atleta de retos, porque así fue como comenzó su exitosa carrera.
Con nueve años de edad, llegó al Code Jalisco, vio la fosa de clavados y se dijo “me quiero aventar”.