La ciudad de Acapulco, uno de los principales destinos turísticos de México y ubicada en el sureño estado de Guerrero, permanece incomunicada y sin recuento de daños tras el paso del destructor huracán Otis, que tocó tierra este miércoles como huracán de categoría 5.
Múltiples videos en redes sociales subidos por personas que se encontraban en la ciudad dieron cuenta de los grandes daños materiales en algunos de los edificios ubicados en la carretera Costera.
Por el momento, no se ha logrado restablecer la electricidad ni las telecomunicaciones en Acapulco.
Silencio de las autoridades estatales
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, aseguró a primera hora de la mañana que se encontraba en la zona afectada, pero la comunicación por parte de las autoridades estatales y locales ha sido muy limitada.
De acuerdo con el Gobierno mexicano, la Hacienda pública cuenta con hasta 18 mil millones de pesos en fondos de reservas para desastres naturales como Otis.
El huracán también afectó los servicios de alerta sísmica en tres estados del Pacífico mexicano: Michoacán, Guerrero y Oaxaca, principales epicentros de sismos en el país.
