• La capital rusa vive estos días el mes de diciembre más caluroso de la historia
Los niños están inquietos ante la posibilidad de unas vacaciones navideñas sin trineo.
EFE.- Los inviernos rusos ya no son lo que eran, al menos en Moscú. La capital rusa vive estos días el mes de diciembre más caluroso de la historia. Y no sólo es que las temperaturas no bajen de cero, sino que no hay ni rastro del tradicional manto de nieve que cubre habitualmente sus aceras y parques en esta época del año.
TEMPERATURAS PRIMAVERALES
Los termómetros marcan estos días entre 6 y 7 grados por encima de la norma, lo que tiene a los expertos confundidos, a los moscovitas nerviosos y a los niños inquietos ante la posibilidad de unas vacaciones navideñas sin trineo.
Según las previsiones, la temperatura media en diciembre estará ya con toda seguridad por encima de cero – ningún día ha marcado temperaturas negativas- y es muy probable que 2019 sea declarado el año más cálido en 140 años de observaciones meteorológicas (1879).
La especialista del Centro de Meteorología de Rusia Marina Makárova comentó a Efe que en los últimos diez años los inviernos han sido más cálidos y menos nevosos de lo habitual, pero el de 2019 se lleva la palma.
LOS OSOS NO HIBERNAN Y LAS FLORES BROTAN
Los osos de los zoológicos son incapaces de hibernar. Las pistas de hielo se derriten. Las “gorki”, las montañas de nieve en los parques desde las que se deslizan los niños y no tan niños en sus trineos, están cubiertas de hierba.