EFE.- Las vacaciones al exterior de argentinos que pueden permitírselas se encarecieron 30% con la aprobación de la nueva ley de solidaridad social del Gobierno de Alberto Fernández. Quienes viajan tienen que adaptarse mientras hacen las maletas.
La ley cuenta con un tributo que grava al 30% las compras en moneda extranjera, los pasajes de avión internacionales, y la adquisición de divisas extranjeras, las cuales suelen usarse en los viajes al exterior y para ahorro, en un país donde la mayoría de la población guarda su dinero en dólares.
Este impuesto fue bautizado como “PAÍS” por el Gobierno, sigla que responde a “para una Argentina inclusiva y solidaria”, y tiene una vigencia de cinco años.