En el volumen “La revolución intelectual de la Revolución Mexicana” queda claro cómo la Revolución Mexicana generó un fenómeno cultural e intelectual que transformó al país
Entre 1900 y 1940 está el origen de la intelectualidad moderna de México, asegura Yanna Hadatty, investigadora del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, quien afirma que en el volumen “La revolución intelectual de la Revolución Mexicana” (1900-1940), que ella coordinó junto con Norma Lojero Vega y Rafael Mondragón Velázquez, queda claro cómo la Revolución Mexicana generó un fenómeno cultural e intelectual que transformó al país.
“Ahí está ‘Cartucho’, de Nellie Campobello, por ejemplo; para nosotros era importantísimo que más allá del tema de la Revolución se viera un fenómeno cultural e intelectual que habilitó que otros actores, como las mujeres, los periodistas, una clase media que va surgiendo y la gente que migró porque su posibilidad de movilidad social se la daba la Revolución Mexicana, comenzaran a tener un espacio. Entonces había que hablar de esos otros actores y no repetir la historia de El Ateneo a Octavio Paz, que hubiera sido la forma más lógica de abordar el tema”, asegura Hadatty.
La ensayista, autora de otros libros como “Prensa y literatura para la Revolución. La Novela Semanal de El Universal Ilustrado” (México: UNAM/ EL UNIVERSAL, 2016), afirma que de ahí su interés por incluir otras voces y a veces invitar a los especialistas a desarrollar temas que todavía no habían aparecido en los libros, como es el de las mujeres escritoras.
“Partimos de una idea: de cuánto el Porfiriato tiene ecos en la Revolución para pensar la literatura, para pensar a los intelectuales, pero también cuánta cultura se da desde la idea de quiénes deben tener acceso; es decir, es distinto pensar el libro como un objeto carísimo que se manda a imprimir en Francia, que solamente se tiran 300 ejemplares, no es el mismo alcance que tuvieron los libros verdes de Vasconcelos con un tiraje para llegar a toda la República, estar en todas las bibliotecas y ser regalado”, explica Yanna Hadatty.