ALFIL NEGRO

LA LOTERÍA
 

La vida es
Como lotería de feria,
Alguien o algo
Nos va cantando caminos
Y nosotros escogemos
Lo que convence o nos gusta,
Y en no pocas ocasiones
Simplemente lo que toca.
 
“El cotorro”, dice alguien,
Y surgen cosas hermosas,
Los colores de la tarde
Con sol, cielos luminosos ,
Amaneceres rojos y azules
Juegos de luces y sombras,
Los colores de la vida.
 
La voz nos grita: “LA DAMA”,
Y se inicia nuestra historia,
Ella hermosa como siempre,
El Fuerte, joven y guapo,
Casi 30 años el mozo
19 o 20 ella,
Y así se inicia un camino
De pareja enamorada,
Que vivirán en su historia
Agua, tormentas y luces,
La alegría de unos pequeños
Que dirán mamá y papá,
Pero siempre de la mano
Con el amor en los ojos
como fue el primer momento
Y será casi seguro
El adiós de la vida,
Con los ojos viendo juntos
Lo que el Señor les depare.
 
“EL PARAGUAS”, grita el guía,
Y soñamos en la lluvia,
Las gotas tortugas blancas
De cristal, plata y diamantes,
Los barquitos en sus lagos,
Mi laguna con sus patos,
Mi padre y su capisayo
Y yo niño en el dintel,
Viendo caer nuestra lluvia
Y como sueño en la calle
Mi abuelo con paso firme
Sin importarle mojarse
Para abrazar a su nieto
 
“VIOLONCHELO”, suena fuerte,
Y regresan a mi mente
Las fiestas de San Miguel,
Sin luz, ni orquesta tocando,
Sólo alegrando la fiesta
Gonzalo y su mandolina,
Que aunque ya se fue por siempre,
Sigue sonando en las calles,
Llorona que busca al hijo,
Melodía que busca noche,
Las noches de San Miguel.
 
“EL ÁRBOL”, sigue en la lista,
Y el bosque de los recuerdos
Crece paisaje en mil verdes,
mar de árboles fantasmas
Que brillan con rayos rojos,
Mientras veo caer la lluvia,
Y van sonando mis pasos,
Mientras corro por el bosque,
Un niño que ve en cada árbol
Un ángel de ramas grandes
Alas fuertes, alas verdes,
Canto de la clorofila.
 
 
“LA SIRENA”, suena claro,
Y llegan hasta mi mente
Mi laguna y sus leyendas,
Del ahogado aquella tarde,
Y la llorona que sale
En noches de luna llena,
Para caminar fantasma
por callecitas de piedra
Mientras grita por sus hijos,
Y en las aguas nocturnas
Una sirena de plata
Se zambulle tras la luna,
Perla del agua de estrellas
Y pescados de cristal.
 
De pronto suena: “LA MUERTE”
Con ella todos ganamos,
Con ella todos perdemos,
Y con ella entendemos
Que lo valioso en la vida
No es El Oro o los honores,
Porque todo eso se queda,
Y lloraremos el tiempo
Qué se nos pasó sin frutos,
Lamentaremos lo ciegos
Que fuimos con lo importante,
El amor de nuestra esposa,
El cariño de los hijos,
La amistad de mis amigos,
Las luces del evangelio,
Lo dulce de los helados,
Los mensajes de la luna,
Lo bello de las mañanas,
La caricia de los vientos,
Las peras de nuestro árbol,
El vuelo de los gorriones,
Las aves que rezo diario
Del Rosario de la virgen,
La capilla de mi pueblo
Dónde me llevó mi Madre,
Las frutas de nuestra ofrenda
Las posadas de diciembre,
Y cerraremos los ojos
Contentos de haber vivido
Y Dios que es tan amoroso
Verá carta ganadora
Porque en ese gran momento
Si caminamos alegres
Gritaremos con certeza
“Lotería”… Señor del cielo
“Lotería”, Señor… ganamos.

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