CINE DE AYER
La XVIII Semana de Cine Alemán se inició oficialmente con una función en el teatro Esperanza Iris, del clásico mudo Algol de Hans Werckmeister, musicalizado espléndidamente por Cinema Domingo Orchestra.
La cinta, a punto de cumplir el siglo de vida, está basada en un guión de Hans Brennert y Friedel Kohne que narra la historia de Robert Herne (Emil Jannings), el humilde capataz de una mina de carbón alemana.
Todo cambia cuando aparece un extraño personaje llamado Algol (John Gottowt), que es un alienígena que le ofrece el secreto de una máquina de energía que puede mover a todo el planeta, sin necesidad de carbón u otro combustible.
Herne construye una gigantesca máquina que le permite convertirse en el hombre más poderoso del mundo olvidando a sus antiguos amigos Meter Hall (Hans Adalbert Schlettow) y a su antigua novia María Obail (Hanna Ralph).
El ansia de poder lo lleva a volverse tan mezquino, que no quiere compartir su secreto ni con su esposa o su ambicioso propio hijo Reginald (Ernst Hoffman).
Werckmeister dirigiría 13 cintas más antes de su muerte en 1929, pero ninguna alcanzaría la popularidad de ésta, que está considerada como una precursora de Metrópolis, la obra maestra de Fritz Lang, con sus decorados expresionistas.
Emil Janninhs, su intérprete se convertiría en uno de los más populares actores alemanes por filmes como La última carcajada o Fausto, e incluso emigraría a Hollywood.
Algol resulta pues un clásico acerca de la ambición y el ansia de poder, que desgraciadamente sigue muy vigente en nuestros días. .
