Un día después de que Trump inició una polémica, sugiriendo a cuatro congresistas negras y latinas que regresen a su país, su consejera agravó el debate sobre el racismo de Trump.
Durante una rueda de prensa su asesora, Kellyanne Conway, tuvo que contestar a un periodista que le preguntó a qué países se refería el presidente.
A esta interrogante, Conway contestó con otra pregunta: «¿Cuál es su etnicidad?», alimentado aún más la polémica, ya que ha disparado una ola de reacciones negativas en Twitter.
Andrew Feinberg, sorprendido por la pregunta de la asesora de Trump. la cuestionó sobre la relevancia de esa información a lo que Conway contestó: «Es relevante porque le estoy haciendo una pregunta. Mis antepasados eran de Irlanda e Italia».