ESTO SE ESTÁ PONIENDO DE LA PATADA
Yo no sé, no sé decirte cómo fue, no sé explicarte qué pasó, solamente Félix Aguilera habla del caso, asegura que las mismas autoridades protegen al policía que mató a su hijo. Después de atropellarlo se dio a la fuga, es justo que se haga justicia.
A una semana de que fuera atropellado el motociclista Salvador Aguilera Hernández, de 44 años, por una patrulla de la policía estatal, el miércoles por la mañana se murió en Hospital Magdalena de las Salinas, en la ciudad de México, a causa de las lesiones que sufrió.
La penosa noticia fue confirmada por su padre, pero no de ustedes, sino del accidentado. Señaló públicamente, para haber si de chiripada le hacen justicia, una serie de anomalías que han ocurrido desde el momento en que fue atropellado su hijo. El culpable policía se peló ayudado por sus compañeros y jefes, que lo tapan ante las autoridades correspondientes que haciéndole al mago, han tratado de borrar todos los indicios del accidente, o sea han manipulado el peritaje, y lo que está más grave es que encubren al homicida que después de arrollar a su hijo, se dio a la fuga, a vista de sus superiores. Por eso mismo exige justicia, y que sea castigado.
Pasó que el miércoles 15 de este mes, a las 7 de la mañana, el personal de Seguridad Pública despertó a sus uniformados dándoles el reporte de un choque ocurrido sobre la avenida Juárez, a la altura de la Beneficencia Española.
El mismo informe indica que el percance ocurrió en el “corte de circulación” y dice que el conductor de una motocicleta Italika negra, sin placas, Salvador Aguilera Hernández, de 44 años, vecino de la colonia 11 de Julio, municipio de Mineral de la Reforma, había resultado herido de gravedad, porque había chocado con la unidad de los gendarmes granaderos, y, de emergencia, había sido trasladado al Hospital General de Pachuca, a bordo de una ambulancia de la corporación.
También dice el reporte que el vehículo número 2, implicado en la bronca, es el camión del agrupamiento Fuerza de Tarea, con placas de circulación 0796, al mando de Antonio Hernández. Llegó la unidad de perritos (perdón) de peritos de la Coordinación de Seguridad Estatal, al mando de Josué Martínez Ortiz, quien levantó el parte de tránsito, de cuerdo con el informe.
Esta fue la información que manejó en su momento, la Secretaría de Seguridad Pública Estatal. Lo canijo está en que protegen al homicida, así lo dijo a los cuatro vientos, Félix Aguilera, para que se escuche bien y que sus palabras no les entren por una oreja y les salga por la otra, aunque así parece.
“Es imperdonable que el propio Secretario de Seguridad Pública, Alfredo Ahedo, el querido capitán, y sus colaboradores más cercanos, se presten a encubrir los hechos y protejan al responsable. No habíamos hecho nada porque era importante que atendieran a mi hijo. Los uniformados no habían dicho que estaba grave; al saberlo, no quisimos separarnos ni un momento de él. Sin embargo, pese a los esfuerzos médicos, Salvador falleció en el Hospital Magdalena de las Salinas.
“Estoy aquí para decir lo que realmente ocurrió, y pedir al gobernador Francisco Olvera, ordene una investigación de los hechos que motivaron la muerte de mi hijo, y sea castigado el responsable del homicidio imprudencial, y los encubridores que orgullosamente se dicen servidores públicos, porque el accidente no fue como ellos dijeron”.
El accidente ocurrió el miércoles, 15 de este mes, como a las 6:50 horas, cuando se dirigía a su trabajo, en una constructora que se encuentra en la colonia Rojo Gómez. Existen pruebas contundentes (cámara de vigilancia) los testimonios de los vecinos, que confirman que Salvador fue atropellado materialmente, cuando circulaba sobre la calle Jaime Nunó, que cruza la avenida Juárez.
“La camioneta de la policía se paso la luz roja del semáforo y no pudo frenar y se lo llevó con todo y motocicleta. Hasta ahí terminó el accidente imprudencial, sin embargo el chofer del camión de la policía se dio a la fuga, abandonando a su suerte a la víctima, y creo que eso no se vale, si se hubiera quedado el servidor público, pudo haber apoyado mucho, pues a unos pasos se encontraba el sanatorio de la Beneficencia Española, y lo hubieran atendido de emergencia, sin embargo, lo tuvieron tirado en el suelo por mucho tiempo, esperando que llegara la ambulancia. Para acabarla de amolar, antes de atender a mi hijo llegó una grúa y apresuradamente se llevaron la motocicleta, la que nos indica claramente que les urgía borrar las evidencias del percance y quién había sido el culpable.
“Mi hijo fue trasladado al Hospital General de Pachuca, él, a pesar de que estaba muy herido, les dijo que lo llevaran al Seguro Social, les dio una mochila donde guardaba sus documentos personales, pero no le hicieron caso, a huevo se lo llevaron al Hospital General. Después de varias horas nos avisan que estaba hospitalizado. Cuando acudimos a verlo, lo estaban atendiendo los médicos y nos dijeron que había muy pocas esperanzas de que se salvara porque iba muy grave, por tal motivo solicitamos que lo trasladaran al IMSS, en la avenida Madero. Lo llevamos y al revisarlo, nos dijeron que estaba muy grave y fue traslado de urgencia al Hospital Magdalena de las Salinas, y fue hasta el jueves 16. En ese hospital nos confirmaron que presentaba las siguientes lesiones: fractura en el brazo y pierna derecha, así cono probable fractura en la cabeza, severas complicaciones en el corazón, pulmones, y sangrado de riñón, ese mismo día fue operado.
“Desde entonces nos anticiparon que solo un milagro podría salvarlo y lamentablemente, la mañana del miércoles 22, falleció a pesar de los esfuerzos de los médicos por salvarle la vida. Ya nada podía devolver la vida de mi hijo, pero exijo que este penoso hecho no se quede impune, hago un llamado a las autoridades correspondientes, para que se castigue a el responsable, además que se hagan cargo de los gastos médicos y funerarios, pero han borrado todo lo que le perjudica, y por hay se escuchó decir que el coche que lo atropelló escapó, que ya lo andan buscando. Ayer acudí al hospital en busca de información en relación al ingreso de mi hijo Salvador, me dijeron que no había nada, ni siquiera estaba en la lista de los lesionados que llegaron el miércoles 16, por ello pido que se haga justicia, porque no tienen conciencia, todos son una bola de desgraciados”.
UNA MUJER SE FUE CON EL SANCHO
La mujer huyó con su quelite, llevándose a dos de sus menores hijos. Su esposo anda pidiendo ayuda a la Alerta Amber, pero le dijeron que a esa clase de viejas las busca la policía para que las metan al bote. Una mujer se fue con su querido, abandonando a su esposo, llevándose a sus dos pequeños hijos y de pilón, todos los muebles y aparatos, hasta cargó con la escoba. Su cornudo esposo, Juan Manuel Hernández, de oficio carpintero, la ha buscado hasta por debajo de las piedras, desde hace 8 meses, y no la encuentra.
Su vieja se llama María Pérez, y el Sancho Ramón Pereda, mejor conocido en el bajo mundo como “El Pájaro”. Por eso pide a la policía que los agarren, acusados de privación de la libertad y robo de menores, en agravio de Juan y Patricia, de 3 y 7 años.
El padre de las criaturas anda muy preocupado, y pidió la colaboración del DIF estatal y de la gendarmería, para que los encuentren pronto, pues desde el mes de marzo no sabe nada de ellos, y el tipo que se la llevó tiene antecedentes penales, como los de la selección nacional que metió Guardado.
Es buscado por de fraude, y pide que lo agarren para darle en la madre y a su vieja para darle unos cepillazos para que le devuelva a sus hijos, y para que lo ayuden a encontrarlos, contó su triste historia. Comentó que después de dos años de novios, se casaron por las tres leyes en julio del 2008, y a los dos años nació su hija y luego su hijo Cristian. Su domicilio se encontraba en la calle Hidalgo en Pachuca.
“Ahí mismo vivía Laura, mamá de María, que salió de cascos ligeros, al principio todo marchaba como un soldado, pero hace un año comenzó a cambiar, María se volvió contestona y muy agresiva, hasta que descubrí que me andaba poniendo el cuerno con un hijo de su madre, desde ahí se quebró una taza y cada quien para su casa. Yo me fui a vivir a la casa de mis jefes y ella se quedó con su madre y una hermana, con el permiso de que me dejaran ver a mis hijos, ya que le entraba con una lana para el pipirín. Según ella decía que salía a las 12 de la noche, muchas ocasiones llegaba borracha y me echaba madres, por su conducta le llamé la atención por el mal ejemplo que le daba a los niños, pero nunca me hizo caso, parece que estaba hablando con una burra, y así se la pasó todo el tiempo, hasta que se largo con su amante, sentí que me cortaron la patas, como si me hubieran dado un faul, pero me aguanté como los hombres, mas nunca olvido el 11 de marzo del presente año, cuando abandonó su casa para irse con su segundo amor, llevándose a mis hijos, dejo vacía la casa.
“Los vecinos me dijeron que como a las 9 de la mañana llegó una camioneta negra, con placas de Michoacán, y en ella se llevaron los muebles y me acabaron de enterrar un cuchillo en la molleja, cuando supe que el tal Ramón se fue con mi mujer y mis hijos, por eso estoy que me carga toda la grosería, me dio una puñalada trapera, por eso pido apoyo a toda la población, que me echen la mano y si la ven, llamen al 066. También pido que se investigue a otra vieja que se llama Guadalupe, que era muy amiga de la traidora, ya que platicando con ella, me dijo que ella sabe con quién están mis hijos, pero me dijo que es cosa que no le importa, que sólo me recomendaba que no la buscara más”.
PACHUCA MUNICIPIO SIN SEGURIDAD
Una ciudad donde existe la pobreza, la miseria, y si quieren saber a dónde, en los barrios altos, en el Cerro de Cubitos, en la colonia La Raza, en San Nicolás, en la colonia Felipe Ángeles, en el barrio de La Estrella. Hay muchos limosneros en el centro histórico, muchos ancianos que están como los maderos de San Juan, que piden pan y no les dan.
Gente enferma que no es atendida en el hospital, las mandan al seguro popular, que invento el chaparro de Calderón, le cambiaron el nombre a los centros de salud. Pero los que más abundan son los ladrones, marihuanos, asaltantes, una ciudad sin turismo, pero vamos a tener Tuzobús, cómo lo vamos a pagar, solo viajará el jefe de familia, los demás que se la echen a pata.
Por otra parte, llegó la delincuencia, hubo asaltos armados a negocios, 7 coches robados. “Válgame Dios”. Con cuchillo en mano, un solitario ladrón se llevo un botín de 30 mil pesos en medicamentos, en la madrugada de ayer, en la farmacia Guadalajara que se encuentra en bulevar Minero, que ya los agarraron de puerquitos.
Según el informe de la policía, a la dos de la mañana entró un hombre con sudadera roja, con un cuchillo en la mano, y se llevó el dinero en efectivo y medicamentos de los más caros; huyó sin que nadie lo detuviera. Hay que comprender a los uniformados, que a esa hora se echan su coyotito.
Pasando a otra cosa, en la avenida de los Venados del fraccionamiento Magisterio, dos sujetos ingresaron a saquear un mini-súper alrededor de las dos de la tarde. Dijo el empleado que por el susto, le ganó en los calzones, le dijo a los patrulleros que entraron a su changarro dos tipos y le preguntaron dónde estaban los vinos, agarraron dos botellas y un celular que se encontraba en el mostrador, y vieja el ultimo, salieron corriendo que ni la cola les vieron.
Hubo otro asalto pero fue a un taxista, ya están acostumbrados, este asalto sucedió a las 4 y media de la mañana, antes de que cantara el gallo, en El Saucillo, donde tres sujetos lo abordaron como pasajeros; el que bailó con la más fea se llama Delfino Flores.
Le quitaron lo poco que se había ganado porque casi no hay pasaje porque cobran muy caro, ladrón que roba a ladrón chin, chin el que se raje. El taxi fue un Nissan Tsuru, con placas de circulación 3541 de Mineral de la Reforma. Les avisaron a los uniformados, que sacaron su peine y peinaron la zona, sin encontrar nada.
Los coches robados son: un Nissan Tsuru blanco, placas de circirculacion HN-8221, en la colonia Aquiles Serdán. En el fraccionamiento Juan C. Doria, un Volkswagen Golf, color negro, modelo 1995, placas HNF-8192, el dueño se llama Arturo Rodríguez. También fueron denunciados otros hurtos en Tezontepec de Aldama, en Zempoala y Tula.
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