Con convicción, la cantante Ximena Sariñana apoya la iniciativa para sancionar a los charlatanes que prometen “curar” la homosexualidad a través de terapias de conversión, pues afirma son “centros de tortura”.
En su calidad de vocera oficial de la campaña “#JusticiaSinDiscriminación”, la también actriz lamentó que en México se esté viviendo una crisis de violaciones a los derechos humanos.
“Y por desgracia la comunidad LGBTTTIQ es una de las grandes víctimas de esto, mediante la violencia y la discriminación”, afirmó la cantante.
“Los Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual e Identidad de Género (ECOSIG) son una forma de tortura (…) sus prácticas están basadas en el abuso verbal, la humillación, el aislamiento, las violaciones y la privación de la libertad.
“Podríamos imaginarnos que estas prácticas suenan a que se desarrollan en centros de tortura durante la guerra o la dictadura, pero no son situaciones que suceden en lugares que prometen cambiar la orientación sexual con base en estas falsas promesas”, refirió Sariñana.