Retomarán la representación del viacrucis

 

Con el inicio de la celebración de la Semana Santa, se mantiene también la tradición de la gente que tiene muy presente lo que se conmemora. Aunque la Cuaresma comienza con el miércoles de ceniza y el carnaval, la Semana Mayor inicia con eventos prácticamente desde el pasado Domingo de Ramos.

En este día un grupo de hombres participan representando a los doce apóstoles, algunos de ellos son integrantes de grupos parroquiales, como los de la Adoración Nocturna o los evangelizados.

En esta representación, la familia Sosa Calva juega un papel muy importante, pues por tradición resguarda en su casa la vestimenta y los báculos de los apóstoles que ese día los pasan a recoger, para luego ir a la iglesia a recoger el burrito  y finalmente dirigirse a la capilla de Guadalupe donde se atavían con las túnicas.

Uno de los participantes lleva coronas de espinas hechas con ramas de tejocote, con las cuales completan la caracterización. Una vez listos, se forman fuera de la capilla para comenzar la procesión encabezada por la imagen de Jesús en el burrito y el sacerdote. En el trayecto se cantan alabanzas y, al paso del conjunto procesional, se agitan ramos de palma trenzada, hierbas aromáticas y otras plantas del monte.

Al terminar la misa, los participantes van en grupo a entregar la ropa y se hace la petición para que puedan recogerla nuevamente el Jueves Santo para el Lavatorio.

Durante el martes Santo, hace años, los encargados del Cristo Nazareno llevaban a efecto la representación del prendimiento de Jesús. Por la tarde en el atrio de la iglesia, entre ramas de encino, representaban la Oración del Huerto; más tarde, sobre unas andas  colocaban un árbol de capulín y la imagen del Cristo Nazareno, y hacían una pequeña procesión conocida como Procesión del Capulín.

En el Miércoles Santo, los encargados del Cristo Nazareno, al interior de la iglesia donde está ahora el confesionario, hacían una reja de madera y detrás de ella colocaban la imagen para representar la prisión de Jesús.

En el Jueves Santo, nuevamente se reúnen las doce personas que participan en la Última Cena y el Lavatorio representando a los apóstoles, para ir a la casa de la familia Sosa Calva para recoger la vestimenta y los báculos.

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