#LIGA MX
• La victoria debe esperar y podría llegar la siguiente jornada ante un moribundo Querétaro.
Ciudad Universitaria sigue sin poder celebrar una victoria. Los Pumas empataron 1-1 ante el Monterrey, y sumaron su quinto partido sin ganar en lo que va del Clausura 2019. Bueno, suman dos victorias en la Copa MX, pero ni la afición recuerda ese par de triunfos conseguidos en Guadalajara. Los seguidores auriazules volvieron a abuchear a su equipo. Bruno Marioni se presentó en Primera División como técnico de los Pumas y lo hizo sembrando más dudas que certezas, claro, lleva una semana en el equipo, pero sus números como técnico ilusionan muy poco. La intensidad de los locales, aunando al sufrimiento de los Rayados por el clima en la Ciudad de México, fue suficiente para que el Barullo no cayera en su debut como técnico en la Liga MX. El limitado equipo universitario, con ocho canteranos en el campo y el sol de su lado, sacó la casta ante el poderío norteño que presume en sus filas al jugador más caro del futbol mexicano, el argentino Maximiliano Meza. Llegó el minuto 24 acompañado del martirio auriazul. El defensor Luis Quintana empujó por la espalda a Rogelio Funes Mori en los linderos del área y se fue expulsado. Momentos después, el colombiano Dorlan Pabón sacó un potente disparo para vencer al arquero felino y abrir el marcador. Los Pumas tuvieron poca respuesta. Pablo Barrera ejecutó un tiro libre y el show se lo robó el portero Marcelo Barovero con una atajada para mandar el esférico a tiro de esquina. Llegó el fin de la primera mitad y los abucheos se intensificaron en el Olímpico. La parte complementaria no cambió mucho. Alfredo Saldívar se puso la capa de héroe y en una jugada realizó dos atajadas que mantuvieron la esperanza viva para los capitalinos. Funes Mori no lo podía creer y hasta abrazó al “Pollo”. Al 83’, el argentino-paraguayo, Juan Manuel Iturbe, quien ingresó de cambio por el capitán Pablo Barrera, sacó un disparo que fue desviado por un zaguero rayado y terminó en el fondo de la portería. Ciudad Universitaria explotó. Los abucheos se olvidaron y la victoria se veía cercana. El silbante Óscar Macías silbó el final del encuentro y aunque siguen sin ganar, la actitud de los capitalinos fue otra, al menos para sus aficionados. Empate plausible que rescataron con 10 hombres, pero preocupante por los números que presentan los universitarios en el torneo. Mucho tendrá que trabajar Bruno Marioni. La victoria debe esperar y podría llegar la siguiente jornada ante un moribundo Querétaro.