• El presidente colombiano pide a Cuba que detenga a su cúpula¨; asegura que el grupo guerrillero “es y ha sido una máquina criminal de secuestros y atentados”
El mandatario consideró que el comportamiento del grupo armado demuestra que no busca el diálogo. “Para toda Colombia hoy es claro que el ELN no tiene ninguna genuina voluntad de paz”, enfatizó. Comparó el ataque con atentados sufridos por otros países
El presidente colombiano, Iván Duque, dio por terminados los intentos de negociar con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) tras el atentado contra la academia de policía de Bogotá, atribuido por la investigación a este grupo guerrillero, en el que el jueves fallecieron más de 20 personas y casi 70 resultaron heridas.
El mandatario compareció horas después de que el ministro de Defensa y el fiscal general proporcionaran algunos detalles de las pesquisas que vinculan lo sucedido con esta organización. Lanzó un firme mensaje a los terroristas y pidió a Cuba, donde se encuentran varios miembros de su cúpula, que detenga a los cabecillas.
“He ordenado el levantamiento de la suspensión de las órdenes de captura a los 10 miembros del ELN que integraban la delegación de este grupo en Cuba y he revocado la resolución que creaba las condiciones que permitan su permanencia en ese país. Esto significa la terminación inmediata de todos los beneficios otorgados a ellos en el pasado por el Estado y la activación de las circulares rojas de la Interpol”, afirmó en una alocución retransmitida por televisión. En la isla se refugia, por ejemplo, Israel Ramírez Pineda, alias Pablo Beltrán, uno de los dirigentes la guerrilla y jefe de su equipo negociador.
Duque se dirigió directamente al presidente cubano, Miguel Díaz-Canel. “Agradecemos”, dijo, “la solidaridad expresada por el Gobierno de Cuba el día de ayer y hoy les pedimos hacer efectivas las capturas de los terroristas que se encuentran en su territorio y entregarlos a las autoridades policiales colombianas”.
Sin embargo, evitó referirse, como ya lo ha hecho, a Venezuela, donde según la inteligencia colombiana se ocultan miembros del ELN y donde el autor material del atentado, José Aldemar Rojas Rodríguez, instruyó a otros combatientes en la manipulación de explosivos.