IXMIQUILPAN
• Con testigos testimonios y denuncias, la víctima pidió que se haga justicia
Había amenazas, siempre se mostró como una persona violenta, aprovechando su relación con la ex diputada federal, Guadalupe Chávez Acosta, también fue prepotente y buscó siempre intimidar a una familia, hasta que el siete de enero de este año, consumó lo que siempre había intentado, golpear a una mujer sin importarle que fuera en la vía pública y en presencia de más personas.
Luis Eduardo Aguilar Pérez, fue asistente de la ex legisladora federal, en Ixmiquilpan radicaba en la colonia de la Media Luna, recientemente cambió su domicilio al fraccionamiento Joaquín Baranda, donde viven sus víctimas.
Todo comenzó el año pasado, cuando pidieron ayuda a la ex diputada para que a través de ella, se gestionaran recursos para la pavimentación de una calle en este fraccionamiento, cosa que se cumplió y se autorizó un presupuesto. Los vecinos, entusiasmados, conformaron un comité de obra para el seguimiento social, se pusieron de acuerdo y lograron que se ampliaran metas, en vez de pavimentar una calle se pavimentarían dos.
Sin embargo, el que fuera su secretario particular de la ex diputada, Eduardo Cardosa de Tula, manejó el tema a discreción, después de algún tiempo vendrían a enterarse que él junto con Luis Eduardo Aguilar, manejarían los recursos económicos para el pago de la constructora, relegando al comité de obras nombrado por los vecinos.
Aunque las diferencias se hicieron presentes, nada impedía que la obra continuara, sin embargo el siete de enero, se informa a los vecinos que se abriría la calle, la cual presentaba deficiencias, es decir, el concreto se estaba levantando, cuarteando y además faltaba un tramo por terminarse, la obra no estaba concluida. Ante el anuncio, los vecinos buscarían una explicación, pues las cosas no estaban a todas luces bien hechas.
El siete de enero, no midió palabras, pues había reclamos por el conflicto de intereses en esta obra, pero ese día su objetivo fue, silenciar los reclamos, yéndose directamente contra la joven, Abigail Isidro, a quien golpeó brutalmente, mientras que sus familiares evitaron que la mamá de ella o su hermana intervinieran para defenderla.
Ella terminó en el hospital, fue evaluada de sus lesiones y animada a denunciar esta agresión que busca se tipifique como violencia de género. Fue interpuesta una denuncia bajo el número de carpeta 07/2019-0040, por los delitos de lesiones, amenazas y lo que resulte.
Abigail, confía en que las autoridades habrán de actuar conforme a derecho, porque no se trata de una agresión cualquiera, más viniendo de quien vino, pero sobretodo dice, es un deber de ella pedir justicia, porque este hecho no debe ser visto como algo aislado.
“No le tengo miedo y no tengo miedo, lo que quiero es justicia”. Mientras, pide que este tema trascienda, porque se trata de un hombre que violenta a una mujer sin ningún miramiento, al mismo tiempo que señala, irá hasta las últimas consecuencias, porque este evento no debe repetirse nunca.