El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cumplió con su promesa frente a sus electores. Lo habíamos dicho en esta columna de Números Claros hace tiempo, el presidente Trump prometió terminar con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y construir su muro fronterizo, al final, está a punto de cumplir ambas promesas; pues la renegociación del TLCAN ha dado paso a una simple acuerdo comercial con aranceles y cuotas, nada que tenga que ver con la creación de una zona de libre comercio, la primera etapa de integración regional de las economías y, una vez ratificado ese nuevo acuerdo, las perdidas producto de la reducción del comercio, como él lo señala, será la contribución de México para construir el muro.
Lo mejor que podría pasarle a nuestro país es que la Cámara de representantes no ratificara el nuevo acuerdo comercial. Con la mayoría demócrata en el Congreso, lo mejor que podría pasarle a Canadá y a México, es que no se ratificara ese nuevo acuerdo comercial y en 2020 llegara otro gobierno que le diera continuidad al TLCAN, revisado y modernizado, pero bajo el espíritu de construir una zona de libre comercio en América del Norte.
Hay muchos temas en discusión en el Congreso de los Estados Unidos, pero por ahora, republicanos y demócratas habían acordado evitar la parálisis de las administraciones y financiar el presupuesto hasta febrero. Pese a ese acuerdo, el presidente Trump ha manifestado su rechazo, pues él tiene sus propios tiempos y proyectos. Aunque hay la convicción de que no habrá parálisis en el gobierno estadounidense, nadie sabe si al final la administración federal de los Estados Unidos continuará operando o no, pues la fecha límite es este viernes por la noche y los legisladores acordaron votar el presupuesto federal hasta el 8 de febrero.
Todo dependerá de la voluntad política del presidente Donald Trump, quien el miércoles afirmaba victorioso que, México está pagando ya la construcción del muro fronterizo, haciendo entender que al sur de su frontera solo hay narcotraficantes y criminales. Entre tanto, el nuevo gobierno de nuestro país señalaba que, entre los Estados Unidos y México existe una relación de respeto mutuo y un buen entendimiento.
Hay que seguir con atención lo que pase en los Estados Unidos, pues los demócratas tomaron control de la Cámara de Representantes y varios proyectos pueden quedar varados, incluida la ratificación del nuevo acuerdo comercial que sustituiría al TLCAN y la construcción del muro fronterizo. Recordemos, que el muro fue una de las promesas de campaña más fuertes del presidente Trump y un símbolo; es verdad que existen ya pedazos de ese muro a lo largo con la frontera con México, pero aún no es una “Muralla China” que separa comunidades nativas y animales silvestres a lo largo de esa frontera que nos une con los Estados Unidos.
Hasta hoy el Congreso ha aprobado varias medidas en los últimos meses para reparar o fortalecer el muro en construcción. Pero es verdad que el presidente había prometido que México pagaría por la construcción del muro y lo sigue afirmando. Así que habrá que poner atención a lo que haga y diga el presidente estadounidense en medio del debate por el presupuesto; pues había dicho que el pago del muro por parte de México sería indirecto y la revisión del TLCN, para sustituirlo por un simple acuerdo comercial le ha dado ventajas a su país. Así que México debería ser cauteloso y dejar que sean los demócratas que enfrente al presidente republicanos y sus proyectos en contra del libre comercio y de la integración regional de América del Norte.
