MORENA
• Previo al término de su dirigencia al frente de Morena, el futuro coordinador afirma que “quede quien quede, debe consolidar al partido como primera fuerza política”
Derivado del cambio dentro de la estructura interna del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en el estado derivado del inicio de un nuevo sexenio, el actual dirigente, Abraham Mendoza Zenteno, señaló que el próximo al frente del partido tiene la obligación de refrendar la institución como primera fuerza política, así como mantener la unidad entre los militantes.
Sobre el proceso de selección para el nuevo dirigente de Morena en Hidalgo, el también futuro coordinador de programas sociales en la entidad afirmó que ya se cumplió una serie de requerimientos por parte de la dirigencia nacional del partido, y que en este aspecto se encuentra en la espera de la designación de una o un delegado para proceder a la entrega del comité estatal.
Sin embargo, afirmó que de no haber una delegación designada antes del sábado 1 de diciembre, el comité ejecutivo nacional de Morena se hará cargo de la dirigencia estatal para asumir la responsabilidad del partido dentro de Hidalgo.
Se trascendió que entre los posibles sustitutos de Mendoza Zenteno se encuentran Cirino Paredes Rubio, quien fuera el colaborador del ex presidente municipal de Tula, y el actual presidente de la Junta de Gobierno de la LXIV Legislatura, Ricardo Baptista González; y por otro lado también se encuentra el ex priista Canek Vázquez Góngora.
Al respecto, el aun dirigente morenista declaró que, además de los antes mencionados, también existen otros prospectos para ocupar la dirección del comité estatal, y opinó que “todos son merecedores de nuestro respeto”, y manifestó que serán respetuosos de la decisión que tomen desde la dirigencia nacional, encabezada por Yeidckol Polevnsky.
Refirió que todos los candidatos para la dirigencia hidalguense son miembros de la militancia morenista, y que el que quede debe tener la sensibilidad para mantener la unidad y el trabajo dentro del partido, y con ello terminar de consolidar a Morena como primera fuerza política en el estado.
“Tiene que ser alguien que comprenda todo el contexto, y que de alguna manera recorra todo el estado, que cohesione a los representantes populares, a los militantes, a los simpatizantes, a los fundadores, a los nuevos, y en ese sentido que se trabaje en el más alto consenso, o que al menos se genere mayorías que den estabilidad”, puntualizó.
