Pulso del Mezquital
¡Increíble pero cierto! El pueblo bueno y sabio, ese que nunca se equivoca ya demostró que no siempre tiene la razón, que también comete errores, porque no les bastaron 80 años y lo volvieron hacer.
Justo en el orgullo chairo, sobre todo a esos que se creyeron aquello de las consultas ciudadanas.
No hablo de AMLOBB que pregunta al público todo aquello que le generan dudas existenciales, sino de la ex diputada federal, Liliana Oropeza, oriunda de Tasquillo, Hidalgo; quien hizo uso de la consulta popular a través de sus redes sociales para saber qué grupo de música grupera deseaban los plebes de ese rancho, ganando la opción A, La Arrolladora Banda Limón, con una apabullante ventaja, que por unos días se convirtió en ídolo popular de la chairiza.
En mi pueblo dicen, que cuando algo suena tan bueno, duda. Y la fecha esperada llegó, las tribaleras fueron boleadas y las texanas desempolvadas, pero ¡oh! sorpresa, el baile prometido no era gratuito, sino que debía pagarse una cuota de recuperación. Como es común en estos casos, los resentidos sociales, esos que esperan todo gratis, pegaron el grito en el cielo, acusando a la exdiputada de mentirosa y porque bailó Bertha las calmadas, pues se habían hecho muchas expectativas con esta consulta civil pacífica.
Le recordaron a la diputada, que el gobierno federal habría aportado vía su gestión, un millón 500 mil pesos, La Arrolladora cobró 800 mil pesos y el resto, centavos más centavos menos, unos 700 mil morlacos, nadie sabe, nadie supo, pero además el cover fue de 70 varitos. Algo que no entiende la chairiza es que, si Dios te da limones, te compras una chelita y te preparas una chelada, así que, si algo aprendió la exdiputada, es que hay vida después de la legislatura, eso se llama emprender, mientras usted ve fracaso, ella ve oportunidades.
Hablando de la banda Arrolladora, quienes ya se ganaron ese mote son los diputados de Ixmiquilpan, quienes han cobrado fama más allá de nuestras fronteras, el infinito y más allá, nomás porque al volante son rápidos y furiosos. Ahora le tocó a la diputada local, Lucero Ambrosio, que fue acusada de besar a un motociclista menor de edad y haberle dado un aventón, solo que el beso fue con su automóvil y el aventón fue como de 10 metros y pues como siempre sucede, se armó el despapaye.
La semana pasada conduciendo su Jetta, adornado con sus dados de peluche, sus playeras del Azul en los asientos, circulaba en el trayecto Ixmiquilpan-hermana república de El Cardonal, a la altura del barrio bravo de San Nicolás, cuando la chocaron, eso dijo, porque la culpa fue 50-50. Resulta que se le atravesó un muchacho en su moto, que no llevaba consigo ninguna medida de seguridad y pues ella no alcanzó a meter el freno. Y haciéndose la muy macha, auxilió al joven, llevándolo a una clínica, donde en seguida se reunieron vecinos y autoridades del pueblo, para después quemarla en las redes sociales que obviamente fue la botana derechaira de esa noche.
Ya lo dijera Rafiki del Rey León, el pasado puede doler, pero tal como yo veo, puedes huir de él o aprender y por lo que yo veo, la diputada aprendió del pasado, porque en una de esas se nos pela y entonces sí, ya no la estaría contando. Lo que a nosotros nos deja de enseñanza, es que cuando salgamos a dar el rol en Ixmiquilpan, roguemos a Dios no encontrarnos con un diputado conduciendo.
En corto:
• Trabajadores del ayuntamiento de Ixmiquilpan, esperarán hasta este viernes para recibir ambos pagos atrasados, luego de que les retuvieran su quincena pasada.
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