NÚMEROS CLAROS
• Según el “Pew Research Center”, el 60% de los electores estarían votando a favor o en contra de Trump este martes, todo un récord; en una campaña que monopolizó el presidente Trump, pero que fue incapaz de movilizar a los electores masivamente, donde, según la tradición, generalmente son desfavorables para el partido conservador
Este martes en los Estados Unidos se decide el futuro del presidente Donald Trump. El presidente estadounidense sabe de la importancia de las elecciones, está consciente que, en realidad, es un referéndum sobre su continuidad o el fin de su gobierno y se ha desenvuelto durante la campaña para renovar el Congreso de su país, como si él fuera el candidato.
No es para menos; para el presidente Trump y los estadounidenses, las elecciones de medio mandato de este martes no serán una votación local, en ellas van sus aspiraciones de reelegirse y de que los republicanos mantengan el control del Congreso; por eso ha dicho en un mitin en Mississippi en el mes pasado: “No soy yo quien me presento a las elecciones, pero es mucho más que eso… es un referéndum sobre mí”, afirmó convencido de la importancia de las elecciones de hoy.
Se trata de una consulta, de un referéndum sobre la continuidad del presidente Trump en el poder. Según el “Pew Research Center”, el 60% de los electores estarían votando a favor o en contra de Trump este martes, todo un récord; en una campaña que monopolizó el presidente Trump, pero que fue incapaz de movilizar a los electores masivamente, donde, según la tradición, generalmente son desfavorables para el partido conservador.
El presidente Trump, en dos meses ha realizado más de 30 mítines en todo el país, el doble que el expresidente Barack Obama en 2010; cuatro veces más que en 2014; se presentó en todas las concentraciones para apoyar a los candidatos que él eligió, para apoyarlos y ganar la mayoría en el Congreso o para evitar que los demócratas se alcen con la victoria y entorpezcan sus proyectos y ambiciones personales; no para defender los intereses de los estadounidenses; para garantizar que sus electores corearan el lema “Trump 2020”.
Para ganar las elecciones de mitad de su mandato y aspirara a la reelección el presidente Trump no ha escatimado esfuerzos y desplegar sus banderas. Él ha defendido su candidato a la Corte Suprema pese a las protestas en su contra, ha sacado adelante su promesa de campaña de poner fin al TLCAN con México y Canadá (fin de la zona de libre comercio), sustituyéndolo por un simple acuerdo comercial con aranceles y ha continuado su enfrentamiento comercial con China.
Pero, como si el propio presidente Trump lo hubiera propiciado para provocar su propia “crisis migratoria” como en Europa y proyectarse como el defensor de sus ciudadanos, ha sacado a relucir su brazo duro y revivido el nacionalismo frente a la inmigración a su país, particularmente, enfrentando las caravanas de migrantes centroamericanos que amenazan con entrar a su país, con la fuerza del ejército.
Steven Law, director de un fondo que apoya a los candidatos republicanos en el Senado, señaló: “Cuando tienes un presidente tan colorido, involucrado y ubicuo como este, aprovechas esta dinámica histórica y agregas esteroides”, y es que según todos los medios, los anuncios publicitarios en la televisión estuvieron precedidos por el nombre de Trump; de tal forma que los republicanos que aspiraban a una candidatura, pero se distanciaron del presidente, al final cayeron en las primarias, para ceder el paso a verdaderos seguidores del mandatario.
Sin embargo, podría producirse un milagro y el rechazo al presidente Trump mostrado en las manifestaciones al inicio de su mandato, podrían tomar forma con un rechazo sorpresivo a él y sus candidatos. Los demócratas han recaudado más dinero que los republicanos en estas elecciones, con lo cual podrían recuperar la Cámara de Representantes; aun cuando los republicanos mantengan su mayoría en el Senado. Pero nada está escrito, pese a que personas como Roy Campos den como ganador al presidente Trump y los republicanos, los resultados podrían sorprender hoy a todos.
