¿LA PATRIA O EL PLANETA!

    •    Un colega Indio que conocí en la magna universidad de la vida, recomienda aprovechar “aún más” las relaciones con los gringos; sugiere ya no pensar en “Patria”; que es mejor elucubrar a nivel planetario sin depender de qué hace el Gran Hermano


Estimado lector, tal vez las líneas que de vez en cuando escribo en estos tiempos tan modernos, no sirvan más que para llenar un espacio en este tan prestigiado Diario local, o para que el estudiante aprenda un poco de por qué gritamos junto a nuestros gobernantes ¡Viva México! Ya que con las nuevas telecomunicaciones todo es más sencillo.

Cabe decir que el mes patrio es más importante para aquellos que aman a su país; para los que nunca han visto un sello en su pasaporte; menos aún ahora que, con las políticas del empresario Donald Trump, está más que claro que pagaremos El Muro (ya casi está). Siento que es más importante ver hacia dentro de nuestro territorio; reflexionar por ejemplo en que el automóvil es una auténtica extensión de nuestro domicilio, con todos los derechos que esto implica, por ejemplo: escuchar música libremente, manejar con o sin aire acondicionado, con o sin faros de niebla, con o sin luces cuando es de día; y por otro lado, respetar las señales de tránsito sabiendo que estamos protegidos, como si estuviéramos dentro de nuestra casa (propia o rentada); es en realidad un espacio; una verdadera extensión de derechos, por lo que si respetamos las normas, nadie, tal y como lo marca la propia Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, puede molestarnos y menos aún irrumpir más allá de nuestras ventanas, ya que, si así lo hiciere, las penas legales serían equivalentes a las que se aplicarían a alguna persona que entrara a nuestro hogar, con los órganos de seguridad presentes (en este caso el agente de tránsito).
También es interesante ver cómo ese amor a la patria se refleja en nuestra vida cotidiana. Cuando oímos hablar de una independencia de los españoles, nos sentimos libres y en paz; más ahora que ya tenemos internet en nuestros celulares y que podemos viajar a cualquier parte del mundo de manera virtual y, si así nos lo proponemos, físicamente, todo con el sudor de nuestro teléfono.
Gracias a esa ley de leyes “que todo país tiene” según las Vacas Sagradas del Derecho, tenemos la oportunidad de vivir tranquilamente sin tener que jurar ante la Biblia cuando llegamos a cometer algún delito. Es, más bien, el Agente del Ministerio Público o Fiscal, quien debe auxiliarnos como defensor de los intereses de la sociedad. ¿Pero cómo están actualmente las relaciones México-España ahora con la llamada, entre los cuates, “Unión”? ¿Cuál debe ser el papel de México frente a los Estados Unidos de América (nuestro vecino inmediato) y también según las vacas sagradas del país, primera potencia mundial por muchas décadas más?
Un colega Indio que conocí en la magna universidad de la vida, recomienda aprovechar “aún más” las relaciones con los gringos; sugiere ya no pensar en “Patria”; que es mejor elucubrar a nivel planetario sin depender de qué hace el Gran Hermano. Seguro que algo plagió de nuestro coleguilla inglés Aldous Huxley y Compañía.
 

Related posts