En cumplimiento al objetivo de rebasar el 60 por ciento de sobrevivencia de plantas, en las jornadas de reforestación, la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) delegación Hidalgo, se ha dado a la tarea de mejorar la calidad de la semilla.
Lo anterior, a través de los cinco viveros ubicados en diferentes regiones del territorio estatal, en donde se realiza todo el procedimiento, que inicia con la semilla, hasta el traslado de la especie a otros puntos para ser plantados.
En ese sentido, la estrategia desarrollada por la dependencia puede llegar a buen puerto, con la certificación de dos bancos de germoplasma; uno de ellos ya anunciado para el ejido de Nopalillo, en el municipio de Epazoyucan y el segundo aún por confirmar.
Cabe puntualizar que estos bancos de germoplasma son los sitios de conservación de material biológico por excelencia, cuyo objeto es la conservación de la biodiversidad, es decir, se trata de recintos clave para evitar que se pierda la diversidad genética por la presión de factores ambientales, físicos y biológicos, y las actividades humanas.
En ese sentido, el titular de la CONAFOR delegación Hidalgo, Luis Armando Aznar Molina adelantó, “estamos por certificar dos viveros, uno de ellos, el próximo 19 de agosto, día en el que se hace entrega de un certificado al ejido de Nopalillo en el municipio de Epazoyucan”.
Precisó que se trata de un reconocimiento internacional que certifica el manejo constante y adecuado de plantas, por lo que agregó, “se trata de una distinción de alta relevancia para el estado y el país”.
Lo anterior al subrayar, que significa la suma de áreas certificadas, “es un proceso que requiere el propietario y el estado mexicano para asegurarse que los bosques se pueden conservar y manejar”, remató.
