Esta no es una solución permanente a nuestros problemas de exceso de pancita, pero ayuda cuando te tienes que meter en un vestido que compraste hace seis meses y el zipper por más que le jalas no sube. Es un body wrap que puedes hacer en casa, el calor te ayuda a tonificar la piel temporalmente, pero lo suficiente como para verte espectacular en tu vestido.
Es súper fácil de hacer, no tiene efectos secundarios (aunque no se recomienda para embarazadas) y necesitas sólo de tres cosas.
Un rollo de plástico para cocina
Una cucharada de jengibre en polvo
Crema humectante de tu elección
Antes de comenzar limpia tu piel con una toalla húmeda. Mójala con agua muy caliente y colócala sobre tu abdomen hasta que se enfríe. Retira la toalla justo antes de aplicar la crema.
Combina ¼ de taza de crema humectante con la cucharada de jengibre en polvo. Unta esta crema por todo tu abdomen y espalda (también se puede usar en las piernas). Después, usa el plástico para dar vueltas a tu abdomen. Debe quedar lo suficientemente apretado como para que se sostenga y no se resbale, pero no tanto como para que te sientas incómoda.
Deja que el body wrap actúe por entre dos y cuatro horas (un poco más si lo aguantas). No te muevas mucho en este tiempo. Una vez que retires el plástico notarás la diferencia.
Recuerda hacer una prueba de alergia untando un poco de crema preparada en un lugar no muy visible 24 horas antes de hacer el body wrap.
