Tulancingo
    •    Son dos personas, en menos de una semana, las que fueron golpeadas y amagadas por habitantes de esta comunidad; la de ayer, los “linchadores” ni siquiera se dignaron a informar sobre las causas de la golpiza que le propinaron al sujeto


Un nuevo intento de linchamiento se suscitó la madrugada de ayer, en la comunidad de Santa María Asunción; donde unas 150 personas golpearon y dejaron gravemente lesionado a un hombre que tuvo que ser trasladado al Hospital General de Tulancingo, por una ambulancia de Bomberos de Tulancingo.
Hasta el lugar de los hechos acudieron elementos de Seguridad Pública de Tulancingo, quienes confirmaron que más de 150 personas mantenían retenida a una persona severamente golpeada; por ello, intervinieron para asegurarla y solicitaron el apoyo de Protección Civil, para trasladarlo a un nosocomio local.
El hombre golpeado representaba una edad de entre 25 y 30 años, media filiación, estatura 1,65 metros, barba y bigote; y además vestía pantalón de vestir color café, sin playera o camisa, sin zapatos.
En atención a la solicitud de apoyo acudió una unidad de Bomberos y Protección Civil y paramédicos, quienes trasladaron a esta persona al Hospital General de Tulancingo para su atención médica.
El hombre se encontraba severamente aturdido y no pudo otorgar mayores datos personales, sólo refirió a los rescatistas que su nombre era Ernesto; pero tampoco supo (o quiso) decir su procedencia u origen.
Tras la valoración médica, se informó que el sujeto presentaba dos heridas lacerantes de aproximadamente dos centímetros cada una, a la altura del tórax; heridas contuso cortantes en ambas cejas; fractura en región frontal de cráneo y contusiones en diversas partes del cuerpo.
En el lapso de una semana, vecinos de esta comunidad han amenazado con linchar a dos hombres, supuestamente sospechosos de cometer actos ilícitos en dicha localidad; el primero de ellos, fue liberado al comprobarse que sufría algún tipo de trastorno mental.
Mientras que el de la madrugada de ayer, fue entregado sin mayor problema a la dirección de Seguridad Pública, luego de la severa golpiza.
En 2013, habitantes de esta misma comunidad retuvieron, golpearon y amenazaron con linchar a dos sujetos que arribaron al lugar para extorsionar a un vecino, quienes más tarde se identificaron como agentes de la Procuraduría General de la República, y fueron liberados tras un enfrentamiento contra policías estatales y municipales.
De los presuntos extorsionadores, nada se supo después.
De igual forma, en el 2016, en un árbol frente a la iglesia de esta misma comunidad, fue amarrado y colgado de las manos un sujeto que presuntamente había entrado a robar a un domicilio particular; sin embargo, más tarde fue entregado a las autoridades estatales.