• La cruda realidad
Casi al mismo tiempo, quienes manejan los Comités estatales de Morena en el país, no se diga Hidalgo, junto con sus similares del Revolucionario Institucional, cayeron en la cuenta de que deben ser más realistas en sus objetivos, y que a partir de lo anterior les será posible entender una de las elecciones más sui generis que se hayan visto en el país.
Hablemos de nuestro Estado.
Morena, hoy en manos del líder del Grupo Universidad, Gerardo Sosa Castelán, reparó que con tirarse al mar y esperar la ola de López Obrador no es suficiente en esta ocasión, y que buena parte de sus candidatos se han echado a la hamaca para esperar la buena nueva de que ganaron sin hacer nada. A lo anterior se suma una incredulidad creciente de la población, que simplemente no da crédito ver ahora, cual descendientes del mismísimo Che Guevara, a un ex rector, una lideresa sindical, todos hasta hace unos meses, acérrimos enemigos de “esos izquierdosos”.
Es decir que la treta de vestir como revolucionarios a sus abanderados, no le ha funcionado del todo al clan que detenta el poder en la UAEH, y han decidido poner en marcha toda la estructura universitaria, ya sin ningún rubor, para lograr por principio de cuentas su objetivo central: apoderarse del Congreso local, y de paso contribuir a darle mayoría a AMLO en el federal.
Si logra lo anterior el presidente del Patronato Universitario, es decir, que su partido tenga mayoría en la Cámara de Diputados de Hidalgo, tendremos que prepararnos para una lucha a muerte contra el Poder Ejecutivo, al que buscarán a toda costa paralizar, y hacer hasta lo imposible para que ninguna iniciativa emanada del mismo tenga buen fin.
Y después, después obviamente veríamos a Gerardo Sosa como candidato a gobernador, igual que a Xóchitl Gálvez, entre otros.
Del lado del PRI, cayeron en la cuenta que en ese mismo sentido, están obligados a defender la trinchera más importante en Hidalgo que es el Congreso, de tal modo que no pueden, ni deben perder mayoría. Al mismo tiempo un hidalguense es encargado de salvar lo que se pueda de la Cámara de Senadores y legisladores federales.
Cada vez se ve más alejada la posibilidad de que su candidato, José Antonio Meade, remonte la desventaja que tiene ante AMLO, de tal modo que es evidente que han tomado decisiones claras en la necesidad de salvar lo que se pueda de lo perdido.
Cómo nunca el pragmatismo de que ha hecho gala AMLO, tendrá que ser el camino a seguir por el tricolor, fruto de una evaluación en el mismo tenor de la campaña de su aspirante a la primera magistratura del país, y en la que para estos momentos se darán topes en la cabeza por no haber postulado al ex gobernador de Hidalgo, Miguel Ángel Osorio Chong, tal vez el único político en serio en el gabinete del Presidente Peña Nieto.
Hoy mismo, es casi seguro, estaría a 5 puntos de un empate técnico con el candidato de Morena, quien en todo lo momento le reconoció liderazgo, y que se negó terminantemente a criticarlo de gratis cuando dejó la Secretaría de Gobernación.
Pero las cartas están en la mesa.
Mal haría quien a estas alturas pensara en forzar los resultados mediante actos de prestidigitación, porque expondría al país a un verdadero caso, e incluso a un eventual golpe de Estado, que regularmente corre a cargo de las fuerzas armadas. A nuestro favor, el de los ciudadanos, es que el Ejército Mexicano es de los pocos en toda América Latina, que siempre se ha mantenido apegado a los principios de la Constitución.
Pero…
Mil gracias, hasta el próximo lunes.
jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico
@JavierEPeralta
CITA:
Si logra lo anterior el presidente del Patronato Universitario, es decir, que su partido tenga mayoría en la Cámara de Diputados de Hidalgo, tendremos que prepararnos para una lucha a muerte contra el Poder Ejecutivo, al que buscarán a toda costa paralizar, y hacer hasta lo imposible para que ninguna iniciativa emanada del mismo tenga buen fin.
Y después, después obviamente veríamos a Gerardo Sosa como candidato a gobernador, igual que a Xóchitl Gálvez, entre otros.
