RELATOS DE VIDA
Los fines de semana siempre son motivo de celebración, salidas, diversión o simplemente, para algunos, de terminar labores de casa como lavar para después descansar del ajetreo de toda la semana.
Los fines de semana son para salir con la familia, los amigos, echar retas de básquet, fut, salir a caminar o correr, recorrer un bosque y de esa manera relajarse de la rutina diaria y del estrés del cuerpo.
Pero en la temporada de calor, las cosas cambian, porque hasta los deportistas utilizan la frase típica y pa’ la calor; cada quien completará la frase de acuerdo a su posición, lugar y principalmente estado de ánimo.
Pa’ la calor… agua de horchata, jamaica o frutas de Franky; esencialmente para la familia, hijos, papá y mamá, lo que también se puede acompañar con un helado en caso o canasta, o una paleta de limón.
Pa’ la calor… un café bien caliente, porque algunos estudios señalan que ante temperaturas altas el administrar a tu cuerpo, líquidos calientes, propicia la regulación de la temperatura corporal al medio ambiente, aunque muy pocos siguen este consejo.
Pa’ la calor… una coca cola bien fría, es más servida en un vaso que además contenga hielos, porque además de calmar el calor, también controla la ansiedad derivada de la mejor mercadotecnia difundida en el mundo.
Pa’ la calor… unas frías, unas cervezas o mejor conocidas como chelas, esta frase particularmente se sugiere entre amigos, después de un partido, mientras están las carnes asadas, incluso previo de un súper tazón, pero está frase es particularmente de la mayoría de los mexicanos.
Asi que como diría un reconocido amigo, colega, y editor, “una chevechita”, o como sugeriría un también apreciado amigo y además jefe, “unita nada más”, aunque después acabe con medio cartón encima, nomás por la calor.
