CINE DE MAÑANA
Realmente son pocas las cintas de horror incluidas en la Muestra Internacional de Cine. Si acaso recordamos El resplandor de Stanley Kubrick o más recientemente Voraz de Julie Ducornau.
En la LXIV Muestra que se exhibirá próximamente en el teatro Guillermo Romo del Vivar se incluye el cuarto largometraje del noruego Joachim Trier, La maldición de Thelma de quien ya se había exhibido su ópera prima Reprise, comenzar de nuevo.
El guión de Eskil Vogt narra la historia de Thelma (Elie Harboe) una adolescente que está a punto de abandonar el hogar paterno para ir a la universidad.
En una de las escenas más impactantes de la cinta, vemos un flash back a la pequeña Thelma acompañar de cacería a su padre Trond (Henrik Rafaelsen), y éste en un momento, en vez de dispararle a un venado, se voltea y apunta a su propia hija.
Poco a poco nos iremos enterando de la maldición de la chica, que sufre un ataque epiléptico en la biblioteca.
Su compañera Anja (Kaya Wilkins) se interesa por ella, y poco a poco nace una relación amorosa entre ella, lo que atormenta a Thelma, pues se trata de una cristiana que no bebe alcohol “por sus creencias cristianas”.
El filme tiene reminiscencias con Carrie, extraño presentimiento, de Brian de Palma, sobre una novela de Stephem King, solo que con toques lésbicos.
El poder de la chica, la hace que cuando desea algo con gran fuerza, esto se cumpla, aunque eso signifique la muerte de alguien, muy al estilo de La profecía de Richard Donner.
Thelma resulta pues un filme de horror nórdico, que sin embargo no ofrece nada nuevo.
