Seguro, en el puesto de jugos, has visto una semilla de color negro… Y aunque su apariencia puede resultar “insignificante”, debes saber que ésta podría acelerar la pérdida de peso. ¡Claro, si aprendes a consumir la chía de forma correcta!
Para empezar, siempre debes de ingerirla por las mañanas, ya sea en ayunas o en el desayuno.
La semilla de chía contiene ácido graso, minerales, antioxidante y fibra, nutrientes que mejoran significativamente el tránsito intestinal, reduciendo la posibilidad de sufrir estreñimiento e inflamación abdominal”, revela un estudio de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
1. Antes de irte a la cama, en un vaso, vierte una cucharada de chía; 3 ciruelas pasas.
2. Al día siguiente, cuando despiertes, saca las ciruelas pasa. Y al agua, que tendrá una textura gelatinosa, agrégale el jugo de un limón. ¡Ojo! Las ciruelas pasas las puedes ingerir después de haber tomado el agua.
Recuerda, llevar acabo esta receta por dos semanas, posteriormente descansar un mes y volverlo a intentar otro nuevo periodo.
