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• El cuadro norteño ha conseguido ser un equipo ganador y trascender en la cancha, gracias a un vasto trabajo fuera de ella que le augura un gran futuro.
El perpetuo debate sobre la grandeza de los equipos en la Liga MX tiene un nuevo invitado. Basados en un modelo deportivo que prioriza el desarrollo del equipo con los mejores jugadores de la liga y con visorias precisas en el extranjero, Tigres ha conseguido ser un equipo ganador y trascender en la cancha, gracias a un vasto trabajo fuera de ella que le augura un gran futuro.
Según el portal especializado Transfermarket, la plantilla de la UANL tiene un valor en el mercado de 71 millones de euros. No se ubica como la mejor valoración del continente, ya que equipos como Flamengo (92 mde), Gremio, Palmeiras y Boca Juniors (los tres con 78 mde), y River Plate (73 mde) le superan en el rubro; sin embargo, si es la más elevada del futbol mexicano por una diferencia significativa, ya que su rival más cercano es Monterrey, con una valuación de 44 millones.
Aún con la millonaria inversión que se encuentra respaldada por una de las cementeras más importantes del planeta —según Forbes, la empresa transnacional número 106 a nivel mundial en su ranking Top Regarded Companies, con un capital de mercado superior a los 13 billones de dólares—, no sería suficiente para conseguir los triunfos deportivos que ha conquistado el cuadro felino. Es ahí donde la gestión deportiva de Ricardo Ferretti, en conjunción con la labor del presidente del club, Alejandro Rodríguez, cobra un papel de importancia vital en el buen andar del equipo.
Fue con la llegada de Rodríguez y Ferretti en 2010 que comenzaron los dividendos. En aquel entonces Damián “Chilindrina” Álvarez, proveniente de un exitoso paso en Pachuca, y el defensa brasileño Anselmo Vendrechovski Júnior “Juninho”, que llegaba luego de un paso accidentado por el futbol coreano, fueron las principales contrataciones para reconstruir un equipo que apenas se había salvado del descenso. Con la precisión en los fichajes y la alta exigencia a cada jugador que vestía la playera felina comenzaron a llegar los títulos en 2011, 2015, 2016 y el más reciente en 2017.
El Estadio BBVA Bancomer fue testigo de una final que quedará registrada como el primer clásico regio jugado en la última instancia. El magistral manejo de su plantel le dio a Ferretti un campeonato histórico que los lleva por buen camino. Sus 6 títulos de liga aún los mantienen lejos del América y Chivas, que con 12 ligas son los máximos ganadores en el rubro, pero un par de campeonatos más los pondría a la par que Cruz Azul, por encima de Pumas, y a dos títulos del Toluca, tercero con diez ligas. Tigres han comenzado ese camino en esta década de triunfo.
Sin embargo, pese a las victorias, para seguir rumbo a la grandeza aún tienen en los torneos internacionales una tarea importante por cumplir. Es este el siguiente paso para hacer valer su poderío: la caída contra un mediano River Plate en la Copa Libertadores 2016, mantiene esa gran deuda pendiente. El 2018 será una oportunidad para redimirse y conseguir el campeonato de la Concacaf, para aspirar a trascender en un hipotético Mundial de Clubes para demostrar de qué están hechos los felinos del norte.
