Tulancingo
• El resto de la carne es llevada a otros estados del centro del país.
En el Rastro Municipal de Tulancingo se sacrifican mensualmente un aproximado de mil 500 piezas de res y 750 cerdos; de los cuales, sólo el 10 por ciento se queda para el consumo en Tulancingo o la región, ya que el resto es llevado a otros estados del centro de la República, como la Ciudad de México y el Estado de México.
Así lo informó el secretario de Servicios Municipales, Francisco Velasco Orozco, quien reconoció además que esta cifra disminuyó a raíz de la proliferación de tiendas de autoservicio; sobre todo aquellas que se dedican a la venta exclusiva de carne empacada al vacío.
“Este tipo de tiendas tienen su refrigeradores de almacenamiento, y últimamente son muy concurridas por la gente; sin embargo, desconocemos de dónde proceda esa carne”, aseguró el funcionario.
Velasco Orozco no descartó que en el porcentaje también influya la proliferación de los rastros clandestinos; “este es un tema que está manejando Medio Ambiente desde el inicio de la administración; pero es incomprensible que prefieran acudir a estos lugares, cuando lo que les cobramos es realmente bajo”.
De acuerdo al tabulador publicado en el Periódico Oficial del estado de Hidalgo, respecto a las tarifas oficiales para el cobro de matanza en rastros municipales, se cobra por cabeza 140 pesos en el caso de los bovinos; mientras que son 70 pesos en los casos de los porcinos, caprino y ovino.
En el rubro anterior, cabe mencionar que la tarifa en el caso de los equinos, se especifica cómo “No Aplica”.
“Al rastro nunca nos han traído un caballo para su sacrificio, y en caso de que lo llevaran, no accederíamos ya que se desconoce el protocolo de matanza”, concluyó el funcionario.