La flor de cempasúchil es nativa de México, pero de acuerdo con investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el país de China es el principal productor de esta planta, ya que de lo sembrado en el mundo, tres cuartas partes se gestan allá.
Cuentan los abuelos, que los abuelos de los abuelos les contaron que en la antigüedad existieron dos enamorados, se llamaban; Xóchitl y Huitzilin, ambos desde muy pequeños sembraron en el seno de sus corazones el fuego del amor, del amor que al igual que el sol, quema al dar calor.
Con el paso del tiempo, los amantes regaron con detalles y con amor la relación que algún día esperaban diera un fruto. Todas las tardes subían al cerro para entregarle flores a Tonatiuh, el joven espíritu del sol, quién desde las alturas aprobaba cada uno de los obsequios que del campo le llevaban los jóvenes enamorados. Allá en las alturas de la tierra se juraron amor para toda la eternidad.
Sin embargo un día llegó la guerra, y los enamorados se vieron en la necesidad de separarse, Huitzilin se convirtió en guerrero, libró grandes batallas, sin embargo un día fue herido a muerte y la noticia llegó hasta donde estaba Xóchitl, quien al saberse lejos, no pudo estar al lado de su amado en los últimos momentos de existencia.
Así Xóchitl, sintió como su corazón había comenzado a marchitarse, el dolor había sido tan grande, como si la flecha que había matado a Huitzilin también hubiera atravesado su cuerpo, como si al matar al primero también la hubieran matado a ella, así que con todo el dolor que se puede guardar en el corazón, subió a la montaña y ahí pidió compasión a Tonatiuh, quien al verla acongojada y con un corazón tan débil por la muerte, decidió consolarla con un rayo.
Cuando el rayo del espíritu joven del Sol tocó a la joven, la convirtió en una hermosa flor, en la cual se posó el espíritu de Huitzilin quien se había convertido en colibrí. La flor se abrió en 20 pétalos y emanó de ella un nuevo aroma en la tierra… Así cuenta la leyenda que nació la flor de cempasúchil, la flor de los muertos, la flor del color del Sol.
Y mientras haya flores de cempasúchil y colibríes, los enamorados estarán unidos por siempre como Xóchitl que en náhuatl significa Flor y Huitzilin la forma en que se nombra en esa lengua al Colibrí.
EL NOMBRE
El nombre de Cempasúchil según la tradición náhuatl viene de las palabras (Cempohualli que significa 20 y Xochitl que significa flor), por lo anterior se ha dado la interpretación literal de “flor de 20 pétalos”, sin embargo en la tradición oral también se cuenta como “flor de cuatrocientos pétalos” (de Centzontli-400 y Xochitl).
Su nombre científico es Tagetes Erecta, es una especie de la familia Asteraceae, nativa de México, donde se encuentra en estado silvestre principalmente en los estados de Chiapas, Estado de México, Morelos, Puebla, San Luis Potosí, Sinaloa, Tlaxcala, Oaxaca, Jalisco y Veracruz. Aunque también se produce en otros países de América Central.
REMEDIOS NATURALES
La flor de cempasúchil es utilizada en varias partes del país como remedio casero contra el dolor de estómago, empacho, diarrea, cólicos, indigestión además de combatir parásitos e incluso fiebres y tos, sin embargo también tiene su parte esotérica para limpiar el “espanto” y el “topar aire”.
