DESFALCO A ESCUELA

El hecho ocurrió en el municipio de Tepeji del Río. Ahora quieren que los padres de familia den una nueva cooperación en la escuela. Se confirmó que casi es medio melón de pesos que se tranzaron de  las cuotas escolares en la secundaria Técnica 54 “Octavio Paz” de la colonia Tlaxinacalpan, municipio de Tepeji. Así lo informó la mesa directiva a los padres de familia en la asamblea celebrada el 6 de mayo.

Más de 500 padres de familia se dieron cita a la reunión a quienes se les informó que la SEP entregó los nombramientos a Juan Manuel Santillán Reséndiz, Germán Plata y Ramiro Figueroa Trejo, como presidente, tesorero y vocal, respectivamente, en sustitución de la mesa directiva que encabezaba Raúl Rivas como presidente y que era tesorero Julio González Cruz.

Respecto a la situación financiera, los nuevos representantes expusieron que encontraron serias irregularidades en la administración de los recursos, pues en las comprobaciones de los gastos que recibieron encontraron facturas infladas, notas duplicadas, notas con fotocopias, a mano y firmadas, que no coinciden con  gastos de la cuenta escolar.

Se dijo que hay un faltante de 400 mil chuchos que supuestamente dispuso el ex presidente Raúl Rivas. No es posible comprobar los gastos de 477 mil pesos. Los integrantes de la mesa directiva comentaron que para hacer frente a las necesidades de la institución se requería que los padres hicieran una aportación para cubrir lo que falta.

Porque la Secretaría de Educación Pública sólo cubre los salarios de los profesores, pero los gastos del mantenimiento de la escuela corren por cuenta de los padres de familia, ante esta situación  muchos dicen que no mamen, señalando que ya dieron su cooperación y no están en posibilidades de volver a pagar. Porque ya está terminado el ciclo escolar y tendrán muchos gastos con las inscripciones del próximo año.

Algunos padres demandaron que el director responda por los 400 mil pesos que se llevó Raúl Rivas, ya que la cuenta estaba mancomunada, y si él otorgó su firma para que aquél dispusiera del dinero, que lo pague. El director, con cara de menso, dijo que están en proceso legal de ser cobrados los pagarés. Le contestaron  que cuando los cobren les avisen, pero mientras no darán ni un solo quinto, y que le hagan como quieran.

PIPA DE GAS MACHUCÓ A UNA PEQUEÑITA

Con las llantas traseras, le destrozó la cabeza. Vaya lío en que se metió un pipero, repartidor de gas LP, quien mató a una pequeñita  de un año con 7 meses. La penosa tragedia sucedió en Tezontepec de Aldama, como a las 2 de la tarde. La niña se salió a la calle, en la cerrada de Juan Aldama de la comunidad de San Isidro de las Presas del municipio que ya les dije.

Las autoridades tomaron nota de lo que pasó y anotaron en su libreta que la víctima se llamaba Alexa Nicol Hernández Bautista, que  murió en forma instantánea. Detuvieron al conductor de la pesada unidad, Hilario Hernández Pérez, en el mismo lugar, pues no le dio tiempo de poner tierra de por medio.

Según se sabe, y nos imaginamos, que la culpable también fue su jefa de la chamaquita, que se llama Araceli Bautista García, de 25 años, quien dejó que su hija solita se atravesara la calle, justo en el momento en que pasaba la unidad Ford placas de circulación KZ-25 549 del Estado de México, con la razón social de “Gas Cero” con domicilio en la carretera Villas Nicolás Romero-Tepojaco, colonia Libertad.

Por lo que pasó, los indignados vecinos de San Isidro quisieron partirle la madre al chofer, quien se salvó cerrando las ventanillas y poniendo seguros a las puertas. El chofer es vecino de San Isidro, y les hacía señas desde su cabina, que lo dejaran pelarse.

Cuando lo supo el papá de la víctima, Chayán Hernández Pérez, de 25 años, se le erizaron los pelos del espinazo, y quería comerse vivo al gasero, pero llegó la policía a calmar al pueblo, y sólo lo que hizo fue identificar el cadáver de la niña. El agente del MP, junto con toda su flota, dio el banderazo e inicio la averiguación previa en el distrito de Tula por el delito de homicidio culposo en agravio de la menor de un año con 7 meses, contra quienes resulten culpables; ahí también va la madre, por dejarla sola.

Comentaron los padres de la infortunada niña, que iban al centro y como la criatura comenzaba a caminar, la bajaron a que lo hiciera, y se veía muy graciosa cómo caminaba atravesando la calle, y de pronto pasó el pipero y ya no la vieron, encontrándola debajo del camión.

REGRESAN LOS DELINCUENTES

Pero esta vez les tocó bailar con la más fea, porque se los fregaron, ya que quisieron robar una gasolinera de Acayuca, municipio de Zapotlán de Juárez, mediante un asalto, pero les falló, pues a la hora de actuar les agarró la mano el chango y valieron para puras vergüenzas.

Los policías de Zapotlán se aventaron un 8 y agarraron a un tal Hugo Noguel Trejo, de 18 años, quien vive en la colonia La Providencia del municipio de Mineral de la Reforma, y a Mario Alberto Blanco Dozet, de 19 años, con domicilio en Zempoala.

En un rápido operativo, cayeron en la ratonera los dos ratones, y fueron puestos a disposición del MP. Esto ocurrió después de que se quisieron pasar de listos y perpetrar el robo de 710 pesos, al pedir que les llenaran el tanque en la gasolinera que se encuentra sobre la carretera federal México-Pachuca, pero se pelaron sin pagarla.

Viajaban en un automóvil Volkswagen Bora, gris y plata, placas de circulación HNP-6682, unidad que tiene reporte de robo.

Cuando los capturaron, se verificó en la base de datos, y se supo  que Hugo y Mario cuentan con antecedentes penales en diversos municipios, y se dijo que el gerente de la gasolinera pondrá la demanda para que los maleantes sean consignados a Tizayuca.

A ÉSTOS YA SE LOS CARGÓ EL PAYASO

Andrés Sacudio, mejor conocido en el bajo mundo como “El Chuky”, fue detenido junto con un compañero de mañas, Magdaleno López, en el momento en que ordeñaban un ducto de Pemex. Iban en una lujosa camioneta tipo panel, y pick up para el traslado de gasolina. Intentaron tentar a los uniformados, darles una buena lana, pero los policías no aceptaron.

Los descubrieron en el momento en que estaban muy apurados ordeñando un ducto de gasolina en el municipio de Epazuyucan. Dijeron los policías que les dieron el pitazo cuando daban su recorrido por el lugar, que se estaban conejeando la gasolina en el lugar conocido como El Ocote Chico.

Los agentes salieron hechos la mocha al lugar, donde se quedaron espiándolos cerca de la toma clandestina. Como a las 3 de la mañana se dieron cuenta que llegaban dos vehículos con choferes, que fueron los ahora detenidos: Andrés y Magdaleno.

Se pusieron en friega loca y conectaron las mangueras, de los ductos a las camionetas, y fue cuando les cayeron los uniformados, diciéndoles que no se la iban a acabar. Uno de ellos sacó un rollo de billetes y se los mostró, y les dijeron que también les daban las camionetas con el combustible, pero que los dejaran escapar.

Los uniformados pidieron apoyo y llegaron varias camionetas patrullas, con todo y el MP federal. Ahorita está de la patada, pues al que caigan robándose la gasolina se va a mamar por lo menos unos 30 años encerrado y pagará una multa de acuerdo a los litros que se haya carranceado.

LOS UNIFORMADOS AGARRAN A UN  PEZ GORDO

Un delincuente de los que pesan, quien vino del Distrito Federal,  fue capturado por un uniformado de la policía municipal de Pachuca; el que está muy contento es el capitán.

Este mono robó, mediante asalto con pistola en mano, en una cristalería de la calle de Ferrocarril Central de la colonia Ampliación Santa Julia. El arresto del consumado delincuente se dio hasta el distribuidor vial Miguel Hidalgo, luego de perseguirlo por varias calles, corriendo, y gracias a que no pudo abordar una unidad del servicio público, lo apañaron.

El jefe de seguridad municipal estaba que echaba brincos de gusto, al dar a conocer lo que pasó y la valentía de su elemento, y de la participación ciudadana, porque el hombre que corría llevaba en la mano una arma, y bien pudo enfrentar al policía que llevaba la lengua de fuera, corriendo a todo lo que le daban las patas, gritándole que se parara.

Alrededor de las 6 y media de la tarde, un gendarme municipal realizaba su patrullaje, solo, sobre el bulevar Luis Donaldo Colosio, cuando a unos metros de la calle Ferrocarril Central, vio que un grupo de personas perseguía a un sujeto rumbo al Felipe Ángeles.

Se paró y les preguntó qué pez. Le contaron que aquél acababa de robar. Entonces se bajó de la patrulla y se incorporó al grupo de persecución.

Corrió de nuevo pero al subir al camellón le pasó lo que al zancudo, que una pata se le dobló y la otra se le hizo nudo, y se cayó. La gente que corría tras él ya no lo dejó que se parara, se le fueron a patadas y a trompones; pero el ladrón no se dejaba, se paraba y aventaba madrazos a lo loco. El policía se le puso en guardia. El delincuente le aventó un campanazo, que si no se agacha le pasa lo que al perico.

El uniformado, usando sus estrategias, se le aventó y forcejearon por la pistola, porque el delincuente quería vender caro el pellejo. Entraron otros de los mirones y le echaron la mano al uniformado, quien trataba de ponerle las esposas. Al sujeto se le cayó la pistola de las manos, una tipo escuadra color negro con dorado, calibre 45 milímetros, que en la recámara tenía un cartucho útil y el cargador lleno.

El individuo de 51 años, originario de la Delegación Iztapalapa de la ciudad de México, fue asegurado, llegó uno de los uniformados que le leyó la cartilla exhortándolo a portarse muy bien y no ponerse a las patadas con la policía porque les dan en la madre, y que lo detienen, por robo y asalto, y se lo llevaron al área de retención donde quedará con las autoridades correspondientes.

Una mujer que tenía los pelos parados, que parecía que se acababa de levantar, desgreñada por el susto, estaba en el lugar donde habían robado, y le dijo a la policía que el sujeto que se llevaron entró a su negocio, y ella se espantó cuando le vio la pistola, y que fue un  asalto a un negocio de cristales, en la calle Ferrocarril Central de la colonia Ampliación Santa Julia. 

LA ENCONTRARON ASESINADA

Una joven mujer, que habían reportado como desaparecida, fue encontrada muerta en el Día de las Madres. Los asesinos en vez de darle su regalo, le quitaron la vida.

La víctima tenía 27 años de edad, era vecina de Agua Zarca, en la comunidad de Tenango de Doria. El cuerpo fue encontrado en un despoblado, en Metepec, la mañana del domingo.

Los primeros reportes indican que Felisa estaba reportada como  extraviada. Sus afligidos familiares habían realizado varios operativos de los cuales, no les dieron resultados, y la buscaban hasta debajo de las piedras.

Unos lugareños de Metepec hicieron el hallazgo y sin pérdida de tiempo corrieron a avisarles a los uniformados del municipio, que estaba la mujer muerta. Los uniformados salieron a comprobar si era cierto, y al ver que estaba tiesa, llamaron al personal del Ministerio Público destacado en esa región.

A la mujer sacrificada la reconoció uno de sus hermanos, se dijo por parte de los policías municipales de Tenango de Doria, que la joven era de Agua Zarca. En le círculo policíaco se dio a conocer que el esposo de la mujer es el sospechoso número uno del homicidio.

Dijeron que tenían muchos problemas, alegaban y se peleaban, y es muy probable que el individuo, cuya identidad se ignora, se la haya echado al palto. El día de ayer se hicieron los trámites ante la Procuraduría de Justicia, a fin de hacer la identificación y reclamo legal del cuerpo para darle sepultura.

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