¿Mexicanos al grito de guerra?, no ¡Mexicanos al ritmo de cumbia!
¿Y a dónde se fue nuestro fervor patrio?, ¿acaso ese sentimiento de solidaridad que tanto hemos dicho nos caracteriza a los mexicanos, es solo un mito?; Septiembre, mes de la patria, se diluyó entre chalupas, pambazos y tostadas de pata.
Los mexicanos de esta generación tienen una forma muy distinta para demostrar su nacionalismo, tan distinta que, lo he constatado, ni idea tienen de quienes son los personajes que participaron en la gesta independentista.
La gente abarrotó las distintas plazas del país, más que para festejar la gesta heroica, para estar en primera fila y disfrutar el espectáculo que ofrecieron los distintos grupos musicales que para tal fecha fueron contratados; buscaban los mejores espacios, debidamente aprovisionados de tacos y chalupas, ¡ah, y de paso a eso de las 23:00 horas, se acordaron que iban también a escuchar la ceremonia del grito!, grito sordo que murió en las gargantas frías de muchos de los gobernantes.
Treinta minutos después, ya estaban impacientes por escuchar a su “grupo de moda”; solo treinta minutos duró el recuerdo a los verdaderos próceres de la independencia.
¿Mexicanos al grito de guerra?, no ¡Mexicanos al ritmo de cumbia!; se dirá que así somos los mexicanos, que de todo hacemos fiesta, que la muerte nos pela los dientes y tantas y tantas frases más que hemos inventado para justificar nuestra peculiar forma de ser.
Sea lo que sea, lo cierto es que en esta ocasión no vi por ninguna parte ese sentimiento de mexicanidad que nos enaltecía en esta época; no logro encontrar en qué momento nos perdimos en ese universo de la indolencia; no pude sentir esa vibración que emanaba de todos nosotros los mexicanos cuando se gritaba el ¡Viva México!.
¿Será que nuestras raíces nos estrangularon?, será que el “Made in china”, el “halloween” y el “merry christmas” ya lograron hacer su trabajo?, o seremos nosotros que a fuerza de no ser exigidos terminamos por sentirnos a gusto en nuestra zona de confort?; durmiendo en sueños.
Nuestra mexicanidad no nació ni se murió con los temblores, nuestra mexicanidad no debe ser solo de 16 de Septiembre, pues el 15 no tiene nada que ver con el festejo de independencia; nuestra nacionalidad no se demuestra con pintarnos en la mejilla la bandera nacional y traer un sombrero al estilo “Speedy González”, nuestra mexicanidad ¡debe ser de tiempo completo!, de momento a momento; exigiendo a nuestros representantes gubernamentales pero también cumpliendo con la parte que nos corresponde como ciudadanos de a pie.
No debemos olvidarnos que estamos parados en una tierra noble, aunque hoy contaminada por la impunidad como en el caso de los socavones y las elecciones seudo democráticas; nuestro ánimo creo que también está contaminado de apatía.
¡Viva México!, pero el México de todos, no el México de los que confunden el 5 de Febrero con el 5 de Mayo y lo celebran el 15 de Septiembre, pues están convencidos que el 21 de Marzo solamente se celebra a la Primavera, pero sí saben que el 4 de Julio es la independencia de Estados Unidos.
Las palabras se las lleva el viento, pero mi pensamiento escrito está
