La pareja bélica Trump-Putin y sus consecuencias
• 19.000 soldados suecos y más de 2.000 de otros países muestran músculo militar por tierra, mar y aire frente a una posible amenaza externa con la vista puesta en Rusia
Militares patrullan ciudades frente a la mirada de los viandantes, disparos de metralleta, tanques a todo gas levantando una polvareda en las llanuras escandinavas, cazas vigilando el espacio aéreo, soldados caminando sobre la nieve con inmensos petates a la espalda y toda clase de escenografía de guerra. Así es el escenario que el Ministerio de Defensa sueco ha querido promocionar en un vídeo de casi seis minutos que más que tranquilizar a la población, induce a una sensación de inseguridad y de ataque inminente.
La región del Báltico, al norte de Europa, vuelve a ser escenario militar por tierra, mar y aire. Ayer, las Fuerzas Armadas suecas iniciaron lo que hasta el momento son las mayores maniobras militares del país en los últimos 20 años. Con el nombre Aurora 17, 19.000 hombres y mujeres del país escandinavo -y el apoyo de 2.080 soldados de Dinamarca (40), EU (1.500), Estonia (40), Finlandia (300), Francia (100), Lituania (50) y Noruega (50)- se despliegan hasta el 28 de septiembre en las inmediaciones de la isla de Gotland, Mälardalen, Gotemburgo y la capital, Estocolmo. Además, el próximo jueves, Rusia y Bielorrusia mueven ficha e iniciarán maniobras estratégicas frente a las costas del territorio ruso ultra militarizado de Kaliningrado, a tan solo 1.300 kilómetros de Suecia.
“Tenemos que incrementar las capacidades para defender un posible ataque a Suecia”, reza el lema de la misión en una clara referencia a la constante amenaza rusa, que no sólo preocupa a los países nórdicos, sino de manera especial a Estonia, Letonia, Lituania y Polonia. Allí, más de 4.000 soldados estadounidenses iniciaron en enero de 2017 una serie de ejercicios militares de disuasión frente a una eventual agresión de Moscú.