SALDO BLANCO POR HURACÁN.- La cultura de la prevención es fundamental cuando se presenta un fenómeno meteorológico, porque siempre vale más prevenir que remediar. Y eso fue lo que se hizo ante el paso del huracán Franklin: no exponer la vida de nadie. La suspensión de clases obedeció a esa filosofía de extremar todas las precauciones necesarias para evitar una tragedia. Algo se ha aprendido luego de muchos años en que se actuaba hasta que el problema había estallado. Aunque, por supuesto, como abajo lo anotamos, hay los que hasta situaciones como la que se vivieron, buscan sacarle ventaja política.
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¡AQUÍ NADA MÁS MIS CHICHARRONES TRUENAN!.- Gerardo Sosa Castelán, máximo y único líder del Grupo Universidad, que desde hace 34 años maneja cual dictador porfirista los destinos de nuestra Máxima Casa de Estudios, giró orden al rector de la institución educativa para que hiciera caso omiso de la recomendación del Gobierno del Estado para que suspendieran clases por el paso del huracán Franklin. Al grito de, “¡aquí nada más mis chicharrones truenan!”, el sempiterno mandamás del reino de las Garzas quiso, de este modo, enviar un mensaje al que hace poco le puso un coscorrón en plena mollera, del que no se ha recuperado.
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RICARDO CRESPO.- El ex dirigente estatal del Revolucionario Institucional tiene muy, pero muy poco futuro en la política, y bien que sabe el porqué. Una cosa es equivocarse al hablar, tener un lapsus brutus, y otra seguirle en el juego de hablar a espaldas de quien ya sabe, y que desde que se enteró se la sentenció, y se la ha cumplido. De tal modo que eso de andar con bandera de yo no fui, fue teté, nomás ya no le queda. No la regó una sino muchas veces. Y como siempre fue la soberbia, la maldiva soberbia que ya lo dejó hasta la eternidad en el baúl de los recuerdos. Ni hablar.
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QUE YA LE TOMAN MEDIDAS DE SU TRAJE DE RAYAS.- Pablo Pérez, el subsecretario de Finanzas de la SEH que fue acusado por la malversación de muchos, pero muchos millones de pesos en la pasada administración, ya recibió la visita del sastre para su nuevo traje de rayas que estrenará en las siguientes semanas. Aseguran que ya resignado pidió incluso valenciana española en sus pantalones y andaba animado a que le pusieran sus iniciales a la camisa, pero le dijeron que no, que esos lujos ya no más. Así que de un momento a otro se espera el anuncio.
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