Imposición del FMI… también allá
• El nuevo texto del Gobierno de Temer agiliza los procesos de contratación y de despido y debilita a los sindicatos
En un país que hasta hace meses no tenía techo de gasto sino todo lo contrario, un suelo, y donde los paquetes de medidas como este se consideran un atentado a los derechos de los trabajadores, pocos políticos han osado mostrar su apoyo al proyecto. Y aún así, el texto se aprobó, en principio, con la condición de poder consensuar aún más cambios.
El Senado brasileño aprobó el martes, con 50 votos a favor y 26 en contra, la reforma laboral de Michel Temer, el proyecto estrella y principal dolor de cabeza político del Gobierno en el último año. El texto, provocó incontables manifestaciones y tres huelgas generales mientras rebotaba, agónicamente, de una cámara a otra en busca de apoyos, busca modernizar el mercado brasileño y galvanizar la economía, que, si bien comienza a dar señales de mejora, sigue atrapada en la peor crisis de las últimas décadas. Principalmente, busca agilizar los procesos burocráticos que requiere cada contratación y despido, la mayor queja de los empresarios brasileños y de los extranjeros que intentan hacer negocio aquí.
Entre sus medidas hay algunas que dificultan y encarecen las denuncias del trabajador a las empresas, facilita contratar a autónomos en puestos estructurales, y elimina los tributos obligatorios a los sindicatos (en Brasil hay 17.082 sindicatos; en Argentina, por compararlo con algo, hay 100). También permite que los acuerdos alcanzados entre la patronal y el trabajador se antepongan a lo establecido por la ley: así, se podrán pactar jornadas que tengan hasta 12 horas diarias y 48 por semana. Las jornadas de 12 horas deberán estar seguidas de descansos de 36.
El presidente Temer, si bien gravemente debilitado por los escándalos de corrupción y una denuncia del fiscal general por, supuestamente, haber aceptados sobornos que puede culminar en su destitución, ha empleado el poco capital político que tenía para sacar esta reforma adelante.