•    Venezuela, y especialmente su capital Caracas, volvió a convertirse ayer en escenario de marchas y contramarchas a favor y en contra del régimen de Nicolás Maduro


Un día  después del llamamiento desesperado del opositor Leopoldo López desde la cárcel: “¡Lilian, me están torturando! ¡Denuncien, denuncien!”. Vuelven las manifestaciones… llegan después de las multitudinarias protestas por el asesinato del joven David Vallenilla a manos de la Guardia Nacional Bolivariana, una muerte que ha provocado especial indignación al haberse prácticamente retransmitido en directo.
Las marchas opositoras de ayer tuvieron como objetivo llegar al lugar en el que fue abatido el opositor con tres disparos a quemarropa en el tórax, la sede de la base militar de La Carlota, que linda con la principal autopista de la capital venezolana, la Francisco Fajardo.
El primer vicepresidente del Parlamento venezolano, el opositor Freddy Guevara, indicó en la red social Twitter que el mensaje que llevarán a la Fuerza Armada “es ¡REBÉLENSE! únanse al pueblo, defiendan a los venezolanos que exigimos libertad”.
Henrique Capriles señaló por esa misma vía que en esta fecha los venezolanos se movilizarán “en todo el país exigiendo” a la Fuerza Armada defender la Constitución. Capriles fue de los primeros opositores en subir a las redes sociales imágenes de las marchas: “Démosle un mensaje a la Fuerza Armada: ¿Va a seguir matando venezolanos o va a respetar la Constitución”, declaró a la prensa el diputado opositor José Manuel Olivares en uno de los puntos de concentración en Caracas.
La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) pidió en Twitter a los militares “que bajen sus armas” tras convocar a las movilizaciones en todo el país.