Vecinos de la comunidad de Santa Ana Bathá en el municipio de Chilcuautla, impiden el paso de las colectivas que brindan el servicio en la ruta Dadhó-Ixmiquilpan, debido a que los concesionarios y operadores, se niegan a pagar 18 mil pesos.
De acuerdo a información oficial los pobladores, encabezados por su delegado municipal, Cándido Martín, se apostaron a la entrada para impedir el paso de estas unidades del transporte público, hasta que paguen los 18 mil pesos.
La cuota que les cobran a los colectivos, es parte de un acuerdo de comunidad, en la que sostienen los vecinos, deben pagar los transportistas, porque son ellos los que se benefician del pasaje y aprovechan las calles del poblado.
Ahí, en esta comunidad, los vecinos basados en sus Usos y Costumbres, decidieron que los operadores de estas rutas, debían pagar esa cantidad, la cual será utilizada por la delegación municipal para atender necesidades propias de la localidad.
Los pobladores se mantuvieron pacíficos, en tanto que autoridades de Gobernación y del municipio buscaron entablar un diálogo para resolver este problema a través de alguna negociación que permitiera llegar a acuerdos.
La Coordinación del Transporte en El Mezquital no ha informado sobre los acuerdos y negociaciones realizadas con los pobladores de esta comunidad.
Cabe señalar, que municipios como Ixmiquilpan y San Salvador, algunas de sus comunidades también implementan cobros de esta naturaleza, no sólo al transporte público, sino también a empresas privadas, para que aporten dinero a sus delegaciones o bien para actividades religiosas, incluso materiales de construcción para la mejora de sus calles o espacios públicos.