Nada de protecciones vergonzosas
“Esperamos que no tengan lugar donde esconderse”, apuntan los responsables del Partido Comunista
Los 22 son, en su mayoría, funcionarios provinciales o ejecutivos de empresas estatales. Algunos huyeron hace casi dos décadas; los prófugos más recientes desaparecieron hace cuatro o cinco años.
Están repartidos por todo el planeta. Algunos prefieren una discreta playa caribeña; otros, el bullicio de una gran ciudad, y otros, una localidad pequeña alejada del mundanal ruido. Son un grupo de 22 personas: los fugitivos por corrupción más buscados en China. Hartos de que pululen por el globo sin que según se quejan- nadie pueda o quiera atraparles, las autoridades chinas han optado por publicar no solo sus nombres, fotografías y los cargos de los que se les acusa: también, incluso, sus domicilios.
La idea proviene de la Comisión Central para la Inspección de la Disciplina (CCID), el órgano policial del Partido Comunista. “Estos fugitivos corruptos usaron métodos ilegales para hacerse con fuertes sumas de fondos públicos y escaparon al extranjero para evadir su castigo, lo que ha perjudicado los intereses del pueblo, nuestra credibilidad y nuestra justicia”, declaró en rueda de prensa el director de la CCID, Liu Jianchao.
“Esperamos que la mayoría de los chinos residentes en el extranjero y nuestros amigos internacionales reconozcan el verdadero rostro de estos elementos corruptos y no permitan que manchen el nombre de la comunidad china… que no tengan ningún lugar donde esconderse”, señala un comunicado de la Comisión.
Casi todos son varones, dos son mujeres. Todos están acusados de apropiación indebida de fondos públicos. Y todos parecen compartir querencia por países anglohablantes y que no tengan tratado de extradición con China: casi la mitad, 10 de ellos, viven en EU, mientras que a otros cinco se les sitúa en Canadá. El Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda e incluso el paraíso fiscal caribeño de San Cristóbal y Nieves completan la lista.