El presidente Donald Trump hasta el momento no había podido hacer prosperar las diez leyes prometidas en sus primeros cien días de gobierno, ahora puede decir que lleva una al menos
El presidente Donald Trump poco a poco va aprendiendo el arte de gobernar y materializando sus promesas de campaña y pronto podría desaparecer el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). La Cámara de Representantes votó a favor de derogar ObamaCare y seguramente el Senado hará lo mismo; con ello, el presidente Trump habrá ganado la primer batalla de su campaña por materializar sus promesas frente a sus electores.
Sin duda, esta es la primera victoria legislativa del presidente Donald Trump desde que llegó al poder, la más vistosa, por haber sido el ObamaCare uno de los programas de salud que los demócratas impulsaron desde el gobierno de Bill Clinton. La Cámara de Representantes aprobó el jueves la derogación del sistema de seguro de salud, ObamaCare, por una estrecha mayoría de 217 votos contra 213.
El presidente Donald Trump hasta el momento no había podido hacer prosperar las diez leyes prometidas en sus primeros cien días de gobierno, ahora puede decir que lleva una al menos; mientras en el tintero quedan pendientes los temas de inmigración, impuestos, infraestructura, entre otros. Pero esa victoria no es del presidente Trump, sino del líder republicano Paul Ryan, que había perdido toda credibilidad al no pasar la reforma en marzo; por lo que al concluir la votación señaló que la ley es la realización de la promesa que hicieron a los estadounidenses.
Sin embargo, la reforma debe pasar aún el filtro del Senado, lo cual tomará por lo menos un mes de discusiones, según el senador republicano Bob Corker. A los republicanos no les interesa realmente la salud de los estadounidenses, sino hacer valer su fuerza y sus proyectos, de cara a las elecciones de 2020, que ya cuentan con ganarlas, para lo que requieren materializar las propuesta del presidente Trump, una de ellas quizá sea el poner fin al TLCAN, del cual se ha dicho que los Estados Unidos están pensando en deshacer el tratado y crear uno con México y otro con los Estados Unidos.
La reforma al sistema de salud en los Estados Unidos deja claro que el presidente Trump y los republicanos, no les importa penalizar a la población, como tampoco les importará hacerlo sobre una parte de empresarios que han sacado provecho del TLCAN, si pueden demostrar que hay otra forma de hacer las cosas, de hacer política y mantenerse en el poder por mucho tiempo.
Quizá la derogación del ObamaCare puede darnos una idea de los nuevos tiempos del presidente Trump y del Congreso para impulsar sus leyes. El proyecto de ley se presentó en marzo, con el objetivo de privar del acceso a la salud a 24 millones de estadounidenses y es hasta ahora que has idos aprobado. Sin duda, hay pocas razones para pensar que la nueva versión del sistema de salud pueda mejorar al anterior y sí que pueda excluir a millones de estadounidenses ¿Pero a quién puede importarle cuando la salud es un negocio? ¿A quién puede importarle la cobertura de los hogares más pobres atendidos con el Medicaid y la igualdad de trato de las personas que han sido víctimas de la enfermedad grave?
