MÁS ORDEÑADORES, PERO ESCAPAN

A los delincuentes les han caído como mentada de madre los policías, porque andan detrás de ellos, principalmente a los ordeñadores de ductos clandestinos de Pemex, pero hay algunos ordeñadores que son abusados y ellos espían a los uniformados, cuando los sienten llegar se escapan y dejan el botín.

Unos ordeñadores de ductos clandestinos, que es el robo más popular en estos tiempos, para evitar ser apresados por la policía abandonan los vehículos y se pelan de casquete. Esta vez un ordeñador que iba cargado hasta el tope, al sentir que llegaban los uniformados abandonó  la camioneta en marcha y cayó a un canal de riego, otra camioneta, también cargada de combustible robado, fue abandonada por los delincuentes por una falla mecánica, por lo que los uniformados lograron asegurar más de 3 mil litros en Atitalaquia y Tezontepec de Aldama.

Se dijo que el primer aseguramiento se efectuó sobre el camino de terracería a la altura de Carrasco, en el municipio de Tezontepec de Aldama, en el momento que los uniformados hacían su recorrido de rutina. Se dieron cuenta que en el lugar se encontraba mal estacionada, al parecer abandonada, una camioneta Pick up, color azul, por lo que se bajaron a ver qué pasaba, encontraron en la parte de la carga dos contenedores grandes de plástico, con capacidad de mil litros cada uno. Uno de ellos estaba hasta el tope y el otro vacío.

Los uniformados los llevaron ante el MP de la Federación y la camioneta Chevrolet GMC, tipo Pick up color azul, placas de circulación HJ-24680. El segundo aseguramiento fue en la carretera estatal Tlahuelilpan-Juandho, a la altura del puente del canal, al patrullar encontraron una camioneta color blanco con caja seca, a la que le hicieron el alto pero el conductor los tiro de a locos, sin embargo, más adelante, abrió la portezuela y brincó y corrió hacia las tierras de cultivo.

Dejó la unidad encendida, por lo que siguió avanzando y metros más adelante cayó a las aguas negras, cargada con varios contenedores de plástico. Pocos minutos después los uniformados, con ayuda de una grúa, sacaron la unidad, y traía 4 contenedores de plástico con capacidad de mil 200 litros cada uno, de gasolina. Se informó que la camioneta modelo 2002, color blanco, con placas de circulación HJ-30396, tenía reporte de robo el 31 de enero de este año.  

ATROPELLÓ A UN MOTOCICLISTA

Se le apareció el diablo, los familiares de la víctima, los vecinos, por un pelito y lo linchan, lo salvó la campana cuando llegaron los uniformados, estaban que se los cargaba toda la grosería, le daban un madrazo y le advertían que no iba a salir vivo de esta bronca donde se metió. El chofer, con ojos de borrego, les suplicaba que no se lo fueran a echar al plato, que no lo hicieran, porque tenía muchos hijos, las lágrimas se le salían.

Fue la tarde del domingo, los vecinos de la Loma de San Miguel Vindho del municipio de Tula de Allende lo tenían rodeado, no quitaban el dedo del renglón y le soltaban de patín y madrazos, no lo perdonaban porque el chofer después de que atropelló al motociclista, se iba a dar a la fuga, se le puso al frente una señora, luego llegó una patrulla, y no le quedó más remedio que aceptar su babosada.

Después de que sucediera el atropellamiento, en la calle de Josefa Ortiz de Domínguez, Joel García Hernández, de 45 años, quedó tirado, mirando al cielo, con los brazos en cruz, dijeron los testigos que lo vieron que viajaba en su caballo de acero Honda CR, color rojo, sin placas. Cuando el chofer Miguel Ángel Ramírez Sánchez, de 31 años, vecino de Pueblo Nuevo, conducía una camioneta Chevrolet Pick up color blanco, con placas de circulación EWO-4836, salió de una cuadra sin ninguna precaución, le dio un golpe por la retaguardia, que el motociclista salió volando como el hombre bala, y cayó de ranazo al suelo.

También los testigos aseguraban que atrás del responsable circulaban otros 4 amigos de él, que viajaban en otro vehículo, echando carreritas, y al ver que le dio en la madre al de la moto, hicieron maniobras para parar el trafico y dejar que se escapara, pero eso les cayó como patada en el cuajo a los familiares y vecinos que vieron el accidente, quienes con vehículos y a pata, corretearon detrás de la camioneta dándole alcance más adelante, a la altura del campo deportivo Juárez.

Llegaron sus amigos del chofer y se pusieron en guardia para evitar que lo detuvieran, y se aventaron una lucha a calzón quitado, todos contra todos. La pelea no duró mucho porque llegaron dos camionetas patrullas de los uniformados, que con macana en mano y con su carabina bajo el brazo calmaron  el pleito, al chofer se los quitaron a los que lo estaban golpeando, lo tenían de las greñas y le daban duro de golpes, patadas, manazos, el golpeado fue rescatado y protegido por las patrullas, para que ya no lo golpearan.

Al lugar llegaron otras patrullas más, y se llevaron al chofer a la Dirección de Seguridad Pública municipal, junto con otros rijosos. Según el reporte de los uniformados, dijo que Damián Jiménez Almazán, vecino de la Loma de San Miguel, intervino para defender al presunto responsable del atropellamiento, porque son muy amigos, pero recibió una gran golpiza. Cuando llegaron a la barandilla se sintió muy mal, se desmayó, el médico legista dio orden de que se lo llevaran al Hospital General de Tula-Tepeji, donde su estado es delicado. Fue detenido por riña, Jesús Antonio Jiménez Ramírez, con domicilio en Lomas de San Miguel.

Al motociclista lo habían dejado tirado por estar desapartando a los peleoneros, ni caso le hicieron, poco después fue trasladado a una clínica, se reportó con lesiones leves, con una patas apachurrada, ya que la camioneta le pasó por encima, el chofer que lo atropelló también está muy mal, porque le dieron hasta debajo de la lengua, y a la motocicleta no le pasó nada.

MUERE UNA NIÑA

Una niña de 10 años perdió la vida, su papá se encuentra lesionado, pero no grave, al accidentarse en su camioneta en que viajaban, en los primeros minutos de la madrugada del lunes, esta tragedia ocurrió en la carretera de terracería que comunica  de Chimalacatla a Cualquisque del municipio de Metzttitlán.

De acuerdo con  los elementos de seguridad estatal que tomaron cartas en el asunto, la camioneta Ford tipo pick up, modelo 1999, color verde, sin placas de circulación, aparentemente era conducida con exceso de velocidad y falta de precaución, por Pablo Barrón Hernández, de 32 años, quien resultó lesionado leve. Con él viajaba su hija Denisse Barrón Bautista, de 10 años, quien murió instantáneamente, pues sufrió fracturas en la cabeza, se informó que en el lugar estuvieron los paramédicos de la Cruz Roja, de Protección  Civil, así como los uniformados estatales.

El MP dio fe del cadáver e inició una averiguación previa a fin de aclarecer las causas del percance y en caso necesario, ejercitar la acción penal contra Pablo Barrón, como presunto responsable por conducir a gran velocidad y sin ninguna precaución.

LE DIERON UNA PUÑALADA TRAPERA

Esta es la triste historia de un interno del penal de Tula de Allende, que en una riña se lo echaron al plato, de un a puñalada, sacándole las tripas, en una bronca el domingo pasado, se llamaba Isaac López Bautista, que todavía dando su últimas patadas, se lo llevaron al Hospital General de Tepeji del Río,  donde se peló para el otro mundo.

El personal de trabajo social del mencionado nosocomio fue el que le dio el pitazo al MP, que ya había colgado sus tenis, de volada les ordenó que lo pasaran al Servicio Médico Legista para saber la causa de su muerte, de acuerdo con la certificación ministerial, la víctima presentaba una gran herida en el menudo, que le provocó que se fuera lo más pronto posible al valle de las calacas.

En relación con la bronca, todos los presos cerraron el hocico, y hubo un silencio donde nadie sabe, nadie supo quién robo a la Conasupo.

El MP inició la averiguación, no poniendo nada en la carpeta investigadora porque nadie sabe nada, no hay testigos de lo que pasó, se está sospechando que a lo mejor él solito se mató, tampoco se sabe del interno, por qué estaba encerrado, se ignora si estaba procesado o sentenciado, y cuál era el delito que había cometido.

SE VOLCARON Y SE LOS LLEVÓ LA CALACA

Un horrible y aparatoso accidente ocurrió en la autopista Pirámides- Tulancingo, dejando un saldo de 5 muertos, al volcarse el coche en que viajaban. Perdieron la vida Ángel Ramírez Andrade, de 19 años de edad, el conductor Miguel Ángel Resendiz Moreno, de 20 años de edad, Verónica Sánchez Herrera, de 20 años y los hermanos Iván, de 19 y Ángel Ramírez Islas, de 17.

El accidente ocurrió al mediodía del lunes, cerca del zoológico Reino Animal, sobre la carretera a Tulancingo, a donde supuestamente se dirigían, a la altura del kilómetro 132, hasta el lugar de los hechos llegaron los uniformados de la policía y las ambulancias de la Cruz Roja y los efectivos de la Policía de Caminos. Los 5 jóvenes viajaban a bordo de una Volkswagen Golf color negra con placas de circulación LRU-9619, que se convirtió en un  ataúd de los cinco viajeros, que murieron en el lugar.

Viajaban a una velocidad de 100 kilómetros por hora, dijeron los uniformados que no es la primera vez que suceden estas cosas, porque no iban a la velocidad que se dice sino a mucha más, y luego cuando se quirie frenar ya no se puede, los socorristas de la Cruz Roja ya no pudieron hacer nada por ellos, llegó el MP, y los pasaron ante los médicos forenses.

UN CHAVITO JUGANDO, SE AHORCÓ

Una verdadera tragedia ocurrió a una familia vecina del municipio de Santiago Tulantepec, cuando el niño al estar jugando, se ahorcó este fin de semana. El MP de Tulancingo tuvo conocimiento de los hechos a las 4 de la tarde con 30 minutos, en una casa del centro de la cabecera municipal, donde aconteció la tragedia del niño de 7 años de edad, que se fue al valle de las calaquitas. El papá del menor dijo que su hijo, un día antes, se quiso quedar en la casa de sus abuelos, cuando él estaba en su trabajo, le habló por teléfono su esposa para darle una de las peores noticias, que su hijo había sufrido un accidente.

Salió hecho la mocha, a ver qué Pez, y se trasladó al domicilio de sus jefes, y le dieron la noticia de que su hijo había fallecido, le dijeron que cuando jugaba con una cuerda se ahorcó. No pidió nada en contra de sus familiares, tomando en cuenta que su hijo era muy querido por sus abuelitos, y aceptó que fue un verdadero accidente.

Los médicos legistas determinaron que el pequeño falleció por ahorcamiento, una vez que cumplieron con los requisitos de rigor, el agente del MP hizo entrega del cadáver a sus familiares. El mismo día trasladaron el cuerpo a su lugar de origen, dándole cristiana sepultura

LA COLA DEL COCODRILO

Los metaleros eran los mineros que se habían accidentado y no eran  aceptados para trabajar, ya que sus lesiones eran visibles, como la quebrada de un pierna, de un brazo, sin embargo, por 1940 no había trabajo, mucho menos para ellos.

Muchos metaleros se metían entre los trabajadores a las minas, con el fin de robarse el metal y venderlo en alguna hacienda de beneficio, a veces les iba mal porque los guardias los dejaban encerrados, o muchas otras tenían que caminar para salir por otra mina. La compañía Real del Monte y Pachuca tenía sus propios guardias, que se dedicaban a cuidar sus propiedades, cuando encontraban algunos metaleros, los ponían ante sus jefes para que les dieran un castigo, pero como tenían con qué pagar la multa, por ser la primera vez los fichaban y los dejan libres, ya a la segunda, les quebraban totalmente la pierna, a manera de que no pudieran caminar.

Había canastillas aéreas, que traían el metal de Real del Monte a la hacienda de Beneficio de Loreto, y otras canastillas de las minas del Cristo, San Buenaventura y Santa Úrsula para llevarlas al mismo lugar. En cada viaje en la canastilla, viajaba un guardia que iba armado, y al que se se subía a mover la canastilla para que se cayera el metal, le disparaban.

Los invito este lunes 20 a una conferencia “Caminando por las minas” que se dará por el “Gato Seco” en la Fundación Arturo Herrera Cabañas, en la calle  Allende 113, colonia centro, en Pachuca, a las 6 de la tarde, estará en la música Gustavo Pérez “El Chanis” con su guitarra hidalguense.

gatoseco98ayahoo.com.mx