A pesar de que recientemente fueron despedidos 35 trabajadores del Hospital General de Tulancingo (HGT), la operatividad del nosocomio no se vio afectada, aseguró su director, Arsenio Torres Delgado.
Al momento de reconocer el cese de los trabajadores mencionados, el doctor detalló que la mayoría de trabajadores de nuevo ingreso no cuentan con una base asignada, sino que están por contrato.
Torres Delgado reconoció además que los despidos fueron parte del recorte presupuestal que el estado tuvo en materia de salud.
“Algunos tuvieron que salir, pero tomando en cuenta todo el contexto, el recorte presupuestal no nos afectó en cuanto a reducción de personal”, señaló el médico.
Afirmó que la parte más afectada fue el área administrativa; por lo cual, llevó a cabo reuniones inmediatas con su personal para hacer frente a los retos que esto supone, para el personal restante del HGT. “El recorte fue de 35 personas, de las cuales 60 por ciento fue administrativo, y el restante personal médico, tomando en cuenta criterios como preparación y antigüedad”.
Arsenio Torres, aseguró también que lo anterior se hizo con base en un informe mensual que el HGT debe entregar a personal de la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), donde se enlistan rubros como asistencia, productividad, entre otros.
Debido al tamaño del hospital que está por cumplir un año de haber iniciado operaciones, en un futuro próximo se necesitará más gente para operar en el sitio, por lo que el director señaló que habrán de venir otras contrataciones.
“Hablé con el diputado Marroquín y me dijo que está pendiente la asignación de un recurso para contratar nuevo personal, y una vez que el recurso sea autorizado, tras el recorte, seguimos laborando poco más de 600 personas”, concluyó.
