(Todo tiene un principio y un fin, todo comienza y todo termina, a no ser la divinidad y esto de acuerdo a la convicción y a la fe de cada quien, pero en política las eternidades no existen y las pruebas están de acuerdo a la historia en el imperio romano que poderoso y hecho al parecer para la eternidad se acabó, lo mismo los egipcios, los alemanes, los aztecas, y todos los que en su momento soñaron en estar hechos para nunca dejar de ser. Finalmente el tiempo y las circunstancias los vencieron y ahora son sólo recuerdos. En Hidalgo, el poder del GRUPO UNIVERSIDAD por los dislates que comete, parece encaminarse a su final, al cambio, a la transición, para que la UAEH deje de ser el reino de un solo hombre y se convierta realmente en la casa de todos. Los signos indican que esos días se acercan y que los vientos de libertad arrecian…)
SE ACERCA LA TRANSICIÓN EN LA UAEH
LA GARZA MAYOR EN MALOS PASOS
El llamado GRUPO UNiVERSIDAD que no es otra cosa que el equipo de GERARDO SOSA CASTELÁN generado desde la fuerza que le da la UAEH, en dinero, personal, publicidad a través de una estación de radio y las que vengan además de un diario del que no se dice que sea de la casa de estudios pero que nadie podría negar que es del grupo mencionado y que no se mueve si no lo ordena Gerardo, además de maestros y catedráticos que bailan, se retuercen, gritan y manotean de acuerdo a lo que dicta su guía y maestro parece encaminarse por dislates que no se pueden ocultar a momentos difíciles, que bien pudiera ser la hora de la transición y del cambio, después de casi 30 años en que sólo la voz de Gerardo es la que manda y ordena y todos los demás obedecen, en una situación absurda pero cierta.
LA UNIVERSIDAD DEL MIEDO
Sin dejar de reconocer que la UAEH tiene logros importantes en muchos renglones que la ubican como una buena universidad vista desde fuera, tampoco se puede negar que en su vida interna es una casa de estudios donde impera el miedo y el temor y en donde la libre expresión es cosa vedada, por el espionaje al que son sometidos todos contra todos, y la denuncia que se da de quien o de quienes son sospechosos de actitudes contrarias al gran jefe que se hacen acreedores, sean maestros o alumnos a las decisiones que van desde afectación en calificaciones, exámenes, documentos que no se entregan o se condicionan, impedimentos para cargos a los que se tienen derechos que luego no se consiguen, o hasta la pérdida del empleo por las razones que sean, pero que todo mundo sabe que se decide porque el afectado no pensó igual que el dueño de la universidad.
En un panorama de esta naturaleza es obvio que los alumnos lo que buscan es terminar su carrera y dejar la universidad lo antes posible, con el temor siempre de ser víctimas de los sosistas en sus desplantes de poder.
Poder que no es poco con el manejo absoluto de la universidad, sobre todo después de la entrega que el mandato del ex gobernador les hizo por decisión del Congreso que le dio al Patronato todo el poder por encima del mismo Rector que se mantiene ya como figura decorativa, que de hecho ya lo era desde antes, pues rectores como JUAN ALBERTO FLORES ALVAREZ desde 1982, JUAN MANUEL MENES LLAGUNO, JUAN MANUEL CAMACHO BERTRÁN, HUMBERTO VERAS GODOY, LUIS GIL BORJA hasta el actual ADOLFO PONTIGO LOYOLA sólo caminan por dónde suena la campana del gran campanero de la casa de estudios sin independencia ni libertad, pese a que son personalmente hombres de gran capacidad y reconocida fuerza intelectual.
Incluso alguno de ellos cuando así lo quiso Gerardo dejó el cargo alegando una supuesta enfermedad que desde luego nunca existió.
Así de humillante el trato para estos hidalguenses de primer nivel.
SIN EMBARGO…LA SOBERBIA LO LLEVÓ
AL ERROR DEL DÍA 71
Dice el libro sagrado que la soberbia llevó al ángel poderoso a querer enfrentarse al creador, al todopoderoso, creyendo que tenía tal fuerza que podría vencer a quien era el señor de señores. Y ese fue su error, porque fue el principio de su fin, y la soberbia lo acabó. El ángel fuerte se acabó y ahora es historia.
En el día 71 del gobierno de OMAR FAYAD, el dueño del GRUPO UNIVERSIDAD se le lanzó al cuello con los dientes de su diario, cuestionando su lucha contra la corrupción con el tema de las notarías señalando que un hermano del gobernador había sido beneficiado con una de ellas, sin investigar, al parecer, cómo estaba verdaderamente el asunto, porque lo importante era ensuciar todo el esquema de campaña de combate a la corrupción señalando al gobernador como incongruente por el caso del hermano.
Al parecer es muy diferente el caso de como lo presenta el Grupo Universidad en su diario y esto de confrontar a la universidad a través de su medio en contra de un esquema de anticorrupción que apoya toda la ciudadanía, es un error que debe tener un costo, con toda seguridad.
En todo caso expone a la casa de estudios en su buena relación con el gobierno del estado, y la lleva a relaciones por lo menos ariscas y ásperas. OMAR FAYAD no es de los políticos que le tiemble la mano para responder y para aclarar las cosas.
Gerardo pegó primero y sin razón… de eso todos son testigos.
Que luego no se queje cuando venga la respuesta.
