Corrupción en SEPH no debe quedar impune, asegura diputada

●    María Luisa Pérez Perusquía, señaló que está dispuesta a colaborar en lo que sea necesario; además propuso que se prohíba el matrimonio infantil en Hidalgo

La diputada local de la fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI) María Luisa Pérez Perusquía, señaló que ante la investigación que se realiza dentro de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), y ante el puesto que ocupó en la anterior administración, está dispuesta a colaborar en lo que sea necesario, ya que aseguró que ningún acto de corrupción deberá quedar impune.

La también presidenta de la Junta de Gobierno de la 63 Legislatura, aseveró que la detección de posibles desvíos de recursos públicos y venta de plazas, el gobierno estatal deberá actuar conforme a la ley.
“Soy la primera en solicitar como todos los ciudadanos, en pedir se cumpla con la rendición de cuentas no sólo en la SEPH y en todas las instancias, se haga una investigación profunda y si debo acudir para aclarar alguna situación, así lo haré…”

La ex subsecretaria de Educación Básica, dijo que cuando había algún tipo de deficiencia de maestros al frente de alguna aula, era notificado como tal y se cumplía con los lineamientos y el proceso, por lo que destacó que si hay cuestionamientos deberán ser aclarados sin importar de quién o quiénes se trate, situación para la cual agregó que en caso de requerir que acuda a emitir alguna aclaración se hará lo propio.

En otro tema, Pérez Perusquía, no descartó la posibilidad, de que en en la actual legislatura se pueda discutir en el pleno el tema de los matrimonios igualitarios, ya que aunque está contemplado en la Ley de la Familia, se requiere de un análisis muy completo y preciso en el que los grupos parlamentarios abonen y pueda llegar a dictaminarse en breve.

De igual forma, la legisladora hidalguense, subió a tribuna para presentar la propuesta de la modificación al Código Civil a fin de que se prohíba el matrimonio infantil en Hidalgo, ya que aseguró que aún con permiso de los padres, los niños y adolescentes no deberían casarse, ya que no han logrado la madurez física ni psicológica para tener una responsabilidad tan grande como la vida en matrimonio.

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