A operadores del sistema de transporte masivo Tuzobús se les aplicó la prueba de alcoholemia, a fin de prevenir riegos de accidentes que pongan en peligro la vida de usuarios, peatones, y daños en la vía pública, así lo informó Rufino León Tovar, titular de la Subsecretaría de Transporte de Hidalgo.
Al respecto, informó que médicos certificados en salud en el trabajo, adscritos a la Unidad de Medicina Preventiva del Sistema Integrado de Transporte Masivo de Hidalgo, (SITMAH), han llevado a cabo ocho revisiones directas y aleatorias a los operadores; así como la aplicación activa de cerca de 150 pruebas de alcoholemia, de las cuales tres resultaron positivas.
En este sentido, se notificó a la empresa Corredor Felipe Ángeles SAPI de C.V., para la baja inmediata de los operadores, como lo establece la concesión y por representar un riesgo para todos los usuarios.
León Tovar reiteró que “no se permitirán choferes alcoholizados que manejen unidades de transporte público, por la seguridad de todos; este es un programa permanente, que por supuesto, también, se aplicará a la brevedad a operadores de colectivo y taxi, mediante la Unidad de Medicina Preventiva del Sistema de Transporte Convencional”.
Enfatizó que bajo la misma dinámica que con los operadores del Tuzobús, las revisiones se harán de manera sorpresiva y al azar, en diferentes puntos de la Zona Metropolitana de Pachuca, con lo que se enviará un mensaje claro a los operadores del transporte público, cero tolerancia en la ingesta de alcohol.
El subsecretario de Transporte indicó que tanto en estas supervisiones, como en las de rutina, los inspectores tienen la responsabilidad de recomendar a los operadores respetar los límites de velocidad, realizar ascenso y descenso de pasajeros en lugares permitidos; así como respetar el reglamento de vialidad y tránsito.
Por último manifestó que se implementaran todos los filtros necesarios para mejorar la prestación de este servicio, a fin de que los hidalguenses cuenten con un transporte digno, seguro y eficiente.
