El maestro de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Vidal Zavala Rosas, fue asesinado y enterrado en el patio de su casa, ubicada en Xochimilco.
Los presuntos homicidas son tres jóvenes que la semana pasada llegaron a buscarlo a su vivienda en la colonia Paseos del Sur. Se cree que al menos alguno de ellos lo conocía.
De acuerdo con la procuraduría capitalina, el miércoles de la semana pasada los agresores llegaron a la vivienda y el académico los atendió.
La esposa del profesor y su hija estaban en el segundo nivel de la casa. Ellas escucharon cuando minutos después comenzaron a forcejear.
Al acercarse para tratar de ayudarlo, la esposa del profesor y su hija fueron sometidas. Dos de los sospechosos las ataron de pies y manos y las subieron a una de las recámaras, donde las dejaron encerradas.
El otro sujeto se quedó con el catedrático en la sala de la casa.
Varios minutos después, uno de los tres jóvenes sacó a la esposa y a la hija de su vivienda y las llevaron a un hotel de paso en el pueblo de San Luis Tlaxialtemanco.
La esposa del catedrático creyó que se trataba de un secuestro, pues días antes habían recibido una suma cercana a un millón de pesos por un crédito bancario. Sin embargo, sin exigirle algo, las liberaron la noche del jueves.
Al regresar a su casa buscó a su esposo, pero no lo encontró. Al amanecer descubrió que en el patio trasero de la casa habían escarbado. Fue entonces que llamó a la policía.
Ante la sospecha de que ahí podría estar el cuerpo del catedrático pidieron la ayuda de los bomberos, quienes al remover la tierra encontraron a la víctima a casi un metro de profundidad, de acuerdo con la versión brindada por las autoridades.
La Procuraduría capitalina aún no ha establecido el móvil del asesinato y busca a los tres presuntos asesinos.
