CINE DE MAÑANA

En esta ocasión vamos a hablar de “Conspiración divina” una película de  Tarik Saleh, en la que se desnuda la corrupción gubernamental, el arribismo policial y la hipocresía religiosa muy sutilmente

Otro de los platos fuertes de la LXXIV Muestra Internacional de Cine, es “Conspiración divina” de Tarik Saleh.

Este director de origen egipcio, pero nacido en Estocolmo en 1972, se dio a conocer en nuestro país con la espléndida “Crimen en el Cairo”.

Su guion narra una intriga que se desarrolla en la prestigiosa universidad de Al-Azjar, la más importante del islam en Egipto.

El humilde pescador Adam (Tawfeek Barhom) recibe una beca para estudiar ahí, en los momentos en los que se debe elegir a un nuevo imán.

El gobierno maniobra para que sea elegido un religioso proclive a sus intereses, pero su espía es asesinado y el coronel Ibrahim encargado del asunto (Fares Fares) se ve obligado a reclutar a Adam para que sea sus ojos y oídos en el lugar, descubriendo numerosas intrigas que pondrán en peligro la vida de este ingenuo joven.

Saleh desnuda la corrupción gubernamental, el arribismo policial y la hipocresía religiosa muy sutilmente dentro de esta intriga policial que mantiene el interés de los espectadores durante sus 126 minutos.

“Walad min al Janna” ganó el premio al mejor guion en el Festival de Cannes y es sin duda una de las cintas más recomendables del banquete fílmico de otoño.