Si amas las pizzas, seguro esta receta será tu favorita, porque se hace fácil y tu eliges la calidad y cantidad de tus ingredientes.
Ingredientes
4 tazas de harina
2 sobres de 11 grs. c/u de levadura seca
pizca de sal
chorrito de aceite de oliva
hojitas de romero finamente picadas
salsa comercial para pizza
una taza de mozzarella rallado
Los ingredientes que quieran agregar
Procedimiento
Revolver la harina y la levadura y cernir ambas sobre un tazón o sobre la mesa. Calentar una taza o poco más de agua a que se pueda tocar sin quemarse, poco más que tibia.
Poner la harina con la levadura integrada en la mesa limpia, hacer un pocito en medio y agregar poco a poco el agua(pero no toda). Con espátulas ir cortando la masa hacia adentro para integrar el agua.
Agregar cada vez otro poco hasta que la absorba(no debe quedar aguada, más bien escamosa).
Ya con las manos, empezar a amasar con fuerza unos 10-15 minutos, y en el intermedio, agregar el romero, la pizca de sal y el chorrito de aceite.
Cuando la masa no se pegue en las manos la sientas elástica, se divide en dos partes cortando con un cuchillo. Separarlas en bolsa plástica y dejarlas una hora aproximadamente. Pasado este tiempo, se trabaja una con un rodillo. No hace falta enharinar la mesa ni el rodillo, la masa debe quedar flexible y manejable. Precalentar el horno a 200°C.
Trabajar hacia afuera y hacia todos lados con el rodillo para dejar un disco de unos 3 milímetros de grosor aproximadamente. Colocarla en una charola redonda metálica.
Ya lista sobre la charola, a donde la pasamos sin problema debido a su flexibilidad que no permitirá que se rompa fácilmente, se agrega una taza de salsa de tomate para pizzas, esparcir bien y agregar queso mozzarella en cantidad suficiente a toda la superficie. Bajar a 180°C la temperatura del horno y meter en la parte media hasta que empiece a dorar y el queso se haya derretido por completo.
