Home Nuestra Palabra Marko Cabañas “A dónde irán los muertos, quién sabe a dónde irán”

“A dónde irán los muertos, quién sabe a dónde irán”

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PULSO DEL MEZQUITAL

Debe ser horrible gobernar un país, pueblo, ranchería, o como se llame, donde el mal humor y resentimiento social, cargado de ira combinada con envidia permeen. No imagino la impotencia de nuestro presidente Peña, tener que recurrir a esas viejas prácticas que ya no embonan con el nuevo PRI, el acarreo, en algunos casos hasta verse obligados a condicionar los apoyos sociales para que la gente saliera a soltar sus pulgas a la capital del país; porqué,  así por gusto, nadie quería ir, ni porque Lucerito y los Ángeles Azules, amenizaron la pachanga del 15 de septiembre, sin contar el lonche, compuesto de tortas de sardina con frijoles bayos y su coca.
Obligar al presidente a retornar a ese pasado debe ser un gancho al hígado, más aún tener que gritar e irse a dormir sin cenar, pues esta vez no hubo cena mexicana, su esposa tuvo que reciclar un vestido de 70 mil pesos claro, pero que feo es que le digan que parece retrato nomás porque es la segunda ocasión que ocupa ese tacuche, pienso que usted no le gustaría repetir la misma vestimenta verdad, pero vea lo que provocan los resentidos sociales que se reproducen como búlgaros.
Pero no todo es tragedia en el PRI, mientras en algún lado permea la desolación, hay otros lugares cual tierra prometida ¿Ha escuchado aquella frase de, hay muertos que no hacen ruido? Pues haga de cuenta que eso pasa en Ixmiquilpan, es más hay unos que ya huelen a difunto pero no se han dado cuenta y como para ir con las fechas venideras, andan buscando revivir para andar ahí comiendo cerebros todavía.
Resulta, que ante la renovación del PRI municipal de Ixmiquilpan, que también tiene síntomas mortales por más que le hagan la operación que sea, más de un difunto o moribundo, pretende meter mano para salvar lo que aún queda de este partido, el cual está más pa’ allá que pa’ acá. Seguramente la paga debe estar buena,  porque la pelea para cuidar de este achacoso partido incluye, patadas debajo de la mesa, puñaladas y hasta amenazas de insurrección.
Ahí está el excandidato a presidente municipal, Facundo Guerrero, quien hasta en esta columna le estamos dando un soplo de vida, resulta que no conforme con la mortal tunda que le pusieron el cinco de junio pasado, continúa con un ánimo que ya lo quisiera un muchacho en la edad de la pubertad. Igual que Lázaro, después de muerto, se “alevantó” y  anda por ahí causando; en unos, asombro y otros hasta miedo, no vaya ser que les pegue algo.
Este finado político, que le pasó lo que al perro de la tía cleta, la primera vez que salió se la rompieron, anda hiperactivo que ya quisieran ustedes tener una pizca de su optimismo y energías, resulta que no sólo a través de su ejército de “faculiebers”, comparten imágenes de él con el Gobernador durante un evento en Ixmiquilpan, que corresponden a un evento pasado cuando aún no era candidato al gobierno de Hidalgo, pero las hacen pasar como algo reciente, como para llamar la atención y en una de esas ser considerado en algún espacio dentro del gabinete; no conforme con ello, anda buscando también, según él, promoviendo probables cartas a dirigir el partido en el municipio. Ya quedó visto, que a este, los golpes de la vida no lo hacen cambiar.

En corto:
●    Un joven de 19 años, quien sufrió muerte cerebral tras caer en su casa en el municipio de Huichapan, justo el día de su cumpleaños, ha dado esperanza de vida a dos personas más, luego que sus familiares donaran sus riñones.

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