La Selección Mexicana que dirige Jaime Lozano tuvo otra pobre exhibición ayer en Estados Unidos, tras empatar de milagro 3-3 con el conjunto de Uzbekistán, en partido amistoso de fecha FIFA. La única buena noticia para el Tri, fue el reencuentro con el gol de Raúl Jiménez, quien logró concretar dos anotaciones, sin embargo, fuera de eso, la Selección mostró nulos argumentos futbolísticos, en una noche para el olvido. La otra anotación, corrió a cargo del cruzazulino Uriel Antuna.

Apenas al minuto 8” Uzbekistán se fue al frente en el marcador, por conducto de Bobur Abdikholikov. Sin mayores esfuerzos los asiáticos ya lo ganaban. Tres minutos después, Raúl Jiménez empataría el encuentro para colocar el 1-1. Antes de que concluyera el primer tiempo, nuevamente los asiáticos sorprendieron y pusieron el 1-2 por obra de Azizbek Turgunbuek.

Para la parte complementaria, México se fue con todo en busca del empate y al 81” nuevamente Raúl Jiménez aprovechó un error de la defensiva para igualar las acciones 2-2. Antes de los 90 minutos, Uriel Antuna se encontró de manera fortuita con la tercera anotación. Todo parecía indicar que el Tri salvaría la noche, pero en el último suspiro, Uzbekistán se encontraría con el 3-3 definitivo, gracias a un terrible error del portero Guillermo Ochoa, quien no pudo contener un disparo de tiro libre, el cual no llevaba mucho. Con esto, México firma otra desastrosa exhibición, donde no se le ve ni pies ni cabeza.